Sin vaivenes en clase

Una inmensa mayoría de docentes y padres de alumnos de educación infantil (de 0 a 6 años) exige que la educación adquiera el nivel de política de Estado , sin tintes partidistas, y que no continúe estando al albur de constantes cambios legislativos que «desestabilizan, desconciertan y repercuten negativamente» en los profesionales del sector y en los alumnos. En concreto, un 86% demandó un pacto de Estado por la Educación entre los principales grupos políticos, según un estudio de opinión realizado por la Asociación Mundial de Educadores Infantiles (AMIE), una entidad asociativa, con categoría de ONG, con presencia en casi todo el mundo. El presidente de AMIE, Juan Sánchez, reclamó que el primer ciclo de educación infantil (entre 0 y 3 años) sea también de carácter obligatorio y no continúe teniendo una connotación de guardia y custodia, como si se tratara de una guardería. «La educación debe transmitirse desde el primer momento, y no supone ningún problema social o económico, ya que existe una cobertura creada», dijo. Sánchez demandó, asimismo, que todos los profesionales de la educación infantil cursen, al igual que los profesores de primaria, el grado universitario de cuatro años y no se limiten a ser titulares de Formación Profesional, como hasta ahora. El estudio, basado en 1.756 cuestionarios, consistió en una única pregunta: «¿Qué le preguntaría o qué acciones te gustaría que realizara el Ministerio de Educación con relación a la educación infantil?». Se pronunciaron un 79% de maestros de primaria -un 46% de centros públicos y un 54% de centros concertados y privados- y un 21% de padres y madres, en su mayoría de zonas urbanas y un 13,5% de zonas rurales. Un 92% reflejó la escasa importancia que se da a la educación infantil por parte de los partidos políticos mayoritarios, un 86% refirió el «impacto negativo» de los sucesivos cambios legislativos en la materia y un 79% de maestros y educadores mencionaron la elevada ratio de alumnos por profesor en las aulas. Separación ilógica La «falta de cobertura en el primer ciclo» (0-3 años) es una constante en las respuestas de un 66% de los profesionales de la educación, mientras que un 49% de los padres manifestó las dificultades encontradas para encontrar plaza en las escuelas infantiles públicas. Los maestros critican la separación estructural y metodológica entre la primera y la segunda etapa de educación infantil, y «no entienden por qué el primero es de carácter asistencial y el segundo educativo». Aunque con menor porcentaje de menciones, un 46% de los maestros reclamó un mayor «compromiso real» por parte de las familias en la educación y un 38% de estos profesionales pidió mayor formación específica, «más práctica y adecuada al día a día en las aulas».