«Es la enfermedad de la injusticia mundial»
La tuberculosis es la enfermedad más frecuente y prevalente en todo el mundo: «Un tercio de la población mundial lleva el bacilo en su cuerpo de forma latente y sin que les de problemas, pero son un reservorio del germen», señala la doctora Ana José Seco.
Cada año nueve millones de personas enferman y dos mueren a causa de la tuberculosis. El 55% de los casos se concentran en Asia y el 31% en África. Europa apenas registra un 5% de las personas infectadas por el germen. El 80% de los casos se concentran en 22 países del mundo. «La tuberculosis es la enfermedad de la injusticia mundial: si se distribuyeran bien los recursos se podría erradicar porque existen tratamientos eficaces», indica la neumóloga.
Por ello ve necesarias «medidas de solidaridad con los países en desarrollo», tal y como promovió la Separ (Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica) en el año 2008. Desde este colectivo científico se hace hincapié también en la escasa investigación que realizan las farmacéuticas para desarrollar nuevos fármacos. «Los tratamientos son antiguos porque es una enfermedad de pobres y no hay previsión de que en los próximos diez años se haga», indica la doctora.
Las líneas de investigación tendrían que tratar de «acortar el tiempo de tratamiento», que es de un mínimo de seis meses y es la causa de muchos abandonos. La OMS declaró la tuberculosis como emergencia mundial en 1991.