El sur de León consolida el empleo de la mano del campo y de industrias solventes

El sur de la provincia de León consolida el empleo de la mano del sector agrícola y de empresas solventes. Ceranor da por finalizado su Erte y amplía plantilla en Valencia de Don Juan, GAM anuncia 300 empleos en la antigua cerámica de Villacé, los polígonos industriales de Valencia de Don Juan y Santa María del Páramo están llenos y el sector agrícola con sus regadíos modernizados genera entorno a sí el asentamiento de empresas punteras a nivel tecnológico.

Se trata, pues, de un empleo que va más allá del turismo, del cuidado de las personas mayores o de la instalación de energías renovables (placas solares o molinos de viento) y que aleja el foco de las proximidades de la capital leonesa.

Ceranor, líder en el sector de la cerámica en España, confirma el fin del Expediente Temporal de Regulación de Empleo (Erte) y en estos momentos ninguno de sus 115 trabajadores de sus plantas de Valencia de Don Juan se encuentra en esta situación tras la recuperación total de su actividad. Incluso, ha tenido que ampliar su plantilla por necesidades de producción, según informan desde la empresa.

Además, aseguran, Ceranor ha desarrollado procesos productivos más sostenibles mediante la incorporación, ya en funcionamiento, de una nueva planta de biomasa que aprovechará rechazos de otros procesos productivos. Está planta ha supuesto una inversión de más de 3 millones de euros, bajando aún más y de manera significativa la marca de carbono en el producto final terminado.

El fin de los Erte en Ceranor supone una buena noticia para sus empleados y para la economía local, ya que la empresa es uno de los principales empleadores de la zona. Además, demuestra la capacidad de recuperación del sector empresarial y la importancia de tomar medidas efectivas para impulsar la recuperación económica.

Según señalan, el sector de la construcción presenta una tendencia de crecimiento en torno al 4% en este 2023 y Ceranor se mantiene como el principal fabricante de soluciones cerámicas del sector, ampliando sus zonas de influencia hacía el Levante y sur de la península y consolidándose en las zonas norte y centro.

«Confiamos en que el coste energético de este año se mantenga sin alteraciones para que este escenario se conserve en el tiempo», afirman desde la empresa.

Por su parte, la empresa asturiana GAM confirmaba a mediados del mes de abril que creará cerca de 300 empleos en Villacé (municipio de Villamañán) gracias a la implantación de una Planta de Refabricación de Maquinaria, un proyecto de economía circular, en las instalaciones de la antigua cerámica de la localidad.

Se trata de uno de los proyectos más ambiciosos de cuantos se han puesto en marcha en el sur de la provincia en el presente siglo. La empresa ya trabaja en el acondicionamiento de las instalaciones que espera que estén funcionando en el último trimestre de este año, con esos cerca de 300 trabajadores desde el primer momento.

Otra de las industrias referentes en el sur de la provincia es Garnica Playwood, dedicada a la fabricación de tableros de contrachapado de chopo, que cuenta con más de 300 trabajadores en su planta de Valencia de Don Juan y que, aunque en estos momentos se encuentra en Erte hasta el mes de julio, desde la empresa no se cansan de repetir que se trata de una situación coyuntural marcada por el mercado internacional y que, en ningún caso está en peligro la viabilidad de la factoría coyatina.

También en Valencia de Don Juan se anunció hace apenas unas semanas que la empresa Nortegás invertirá 8 millones de euros en la construcción de una planta de biometano en el polígono industrial la primera de la provincia, que permitirá la inyección de 30 GWh anuales de biometano a la red de gas natural, lo que equivale al consumo anual de gas de 8.000 hogares. Igualmente conseguirá una reducción aproximada de 6.000 toneladas de CO2 anuales.

La planta permitirá transformar residuos animales (purines y estiércol, principalmente) de explotaciones ganaderas de vacuno, ovino, cerdos y gallinas, así como otros deshechos de empresas hortícolas o de la fabricación de quesos, entre otros, para convertirlos en biometano, dando así solución al problema de este tipo de residuos en una comarca como la del sur de León que cuenta con numerosas granjas ganaderas.

El sector agrícola también es un pilar fundamental en la zona, especialmente tras la modernización de los regadíos que han atraído a empresas punteras de elevado nivel tecnológico que requieren mano de obra cualificada.

Mención merece también el sector vinícola que, con su constante crecimiento, asienta población en el medio rural.

Otro indicador de las buenas perspectivas empresariales es la situación de los dos principales polígonos industriales, los de Valencia de Don Juan y Santa María del Páramo, que están llenos y sus ayuntamientos trabajan para su ampliación.