La casa, el mejor circuito contra el coronavirus para Vidales

Vivió en primera persona el inicio de la pandemia del coronavirus en Italia. Y además en su epicentro, en la localidad de Bérgamo. A día de hoy de regreso a su casa en León vuelve a encontrarse con una pandemia que como al resto de la sociedad también ha paralizado el mundo del deporte. Y sus objetivos para un año en el que iba a dar el salto a la Fórmula 3. Lo dará pero tendrá que esperar unos meses. Mientras David Vidales no se olvida de mantenerse en forma. Eso sí, sin salir de su casa en la que está recluido desde que llegara de Italia. «Las cosas han cambiado de forma radical en apenas unas semanas», apunta la gran esperanza del automovilismo español que se lamenta de que esta situación «más que en el plano deportivo me está impidiendo incluso ver a mis abuelos. Los tengo tan cerca aquí en León pero tan lejos porque no quiero que les pase nada y menos que puedan contagiarse». Y eso que el piloto leonés no ha dado positivo.

Para Vidales, ahora toca esperar y como deportista de élite buscar soluciones a este nuevo panorama. Lo de ir al gimnasio o montar en un monoplaza está por el momento descartado. «Justo me ha tocado cuando justo se iniciaba para mí la pretemporada y los entrenamientos con el coche», precisa con resignación. Y también sabedor de que para él estos contratiempos hacen aflorar la imaginación. «Desde que he llegado me he buscado soluciones para seguir en forma. Por suerte me he podido traer el TRX y las cintas elásticas. Y de pesas me las he hecho con unas garrafas». Imaginación al poder para un deportista que emplea toda la mañana en los estudios. «Tenemos clases on-line desde las ocho y media de la mañana a las cuatro menos cuarto de la tarde. Los estudios no se pueden perder y además en este año tan importante para mí». Luego, por la tarde, nada menos que cuatro horas de ejercicios y rutinas. Alginas incluso, apunta, nuevas. «He dscubierto ejercicios y formas de entrenamiento que no sabía y creo que me van a venir bien en el futuro», precisa.

Echa de menos no poder estar con sus compañeros. Tambien la rutina de entrenamientos que tras la irrupción en suelo italiano lo llevaron a viajar al Centro Deportivo de Toscana. Antes había viajado a Alemania para probar el monoplaza de la escudería de Schumacher y a Francia al circuitoi de Paul Ricard. «Pero luego todo ha ido muy rápido y los planes que tenía pensados se han esfumado».

En León está con sus padres dispuesto a afrontar de la mejor manera posible la situación. «No sé cuanto durará. Pero creo que esto va para rato. Ojalá me equivoque para bien pero veo que incluso podremos ir a peor. Ahora lo que importa es que a nivel humano y social el daño sea el menor. Lo de volver a la competición y debutar el Fórmula puede esperar. No sé cuando pasará esto y podré volver a motarme en un monoplaza», remarca un David Vidales que ha regresado a León, como hace varias veces cada año, pero en una situación bien distinta. «No puedo ver a mis abielos y el rsto de la familia. Y eso me duele». Está recluido en su casa sin salir. «A nivel mental claro que influye pero hay que tener paciencia. No puedes relajarte y mucho menos desanimarte», precisaa la vez que avisa. «Viví en Italia una situación complicada aunque no estuve muchos días. Ellos van una semana por delante de nosotros y por desgracia lo que pasó allí está sucediendo en España. Creo que se ha actuado un poco tarde y por desgracia la situación se complicará». Y añade el piloto de Fórmula 3 leonés, «por lo menospuedio estar en León que siempre te anima».