Los hosteleros del Bierzo protestarán con una cacerolada para pedir ayudas

La asociación Hostelería del Bierzo anunci nuevas movilizaciones, hoy y mañana, en Ponferrada. Protagonizarán una «cacerolada», en la plaza de Lazúrtegui entre las ocho y las diez de la noche, en protesta por la decisión de la Junta de Castilla y León de cerrar toda la actividad no esencial a las ocho de la tarde al retrasar el Tribunal Supremo el toque de queda a las diez. Además, el colectivo ultima una «gran caravana de vehículos» a Valladolid para el día 26; y estudian, ya, una demanda colectiva para pedir indemnizaciones por «lucro cesante».

Son los acuerdos adoptados por la asociación que no descarta repetir esas «caceroladas» la próxima semana si, el día 23, la Junta sigue sin «levantar» las medidas restrictivas impuestas. El portavoz del colectivo, David Belzuz, aseguró, ayer, que el colectivo está harto de que «les tomen el pelo». «La hostelería no tiene más incidencia que otros sectores, defendió Belzuz, pero nos siguen criminalizando y hay que acabar con esto». Además, el colectivo ha vuelto a criticar que las administraciones han ordenado su cierre sin dar ayudas y sin haber pensado en un «plan de convivencia con el virus» lo que dejará por el camino a cientos de negocios.

Junto a las «caceroladas» que se llevarán a cabo en el centro de Ponferrada, la asociación también ha solicitado, ya, a la Delegación del Gobierno en Castilla y León autorización para llevar a cabo una «gran caravana» hasta Valladolid, el día 26. Una medida de protesta a la que esperan que se unan colectivos de otras provincias de la comunidad autónoma.

Además, la asociación «Hostelería del Bierzo» está estudiando la posibilidad de presentar una demanda colectiva contra la Junta de Castilla y León, para reclamar indemnizaciones por las pérdidas ocasionadas por el cierre adelantado de sus negocios. Tras el auto del Tribunal Supremo, la asociación se preguntan «¿quién pagará las sesenta horas de trabajo perdidas?».

Por último, la asociación afeó, ayer, que el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, no haya tenido el detalle de «pedir perdón» después de que el Tribunal Supremo haya anulado el toque de queda adelantado a las ocho de la tarde en una sentencia que se conoció el martes.