La Junta diseña una campaña especial para los siete sellos de calidad del Bierzo

Lo excepcional, como es contar con siete sellos de calidad en una sola comarca, tendrá un trato especial a la hora de promocionarlo. La Junta de Castilla y León prepara una campaña especial, dentro de la marca Tierras de Sabor con la que da a conocer la agroalimentación de la comunidad, para poner en valor de forma conjunta los siete productos del Bierzo reconocidos con la etiqueta de calidad; las denominaciones de origen del vino y la manzana reineta, las indicaciones geográficas protegidas del pimiento asado y la pera conferencia y las marcas de garantía del botillo, la castaña y la cereza.

Así lo adelantó ayer el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero en una nueva sesión del primero Foro Ponferrada Abierta que organiza Diario de León. La jornada dedicada a la agricultura y al mundo rural, celebrada en el Hotel Ponferrada Plaza siguiendo el protocolo anti Covid, contó además con la participación del portavoz del PP en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala y volvió moderar del director de Diario de León, Joaquín Sánchez Torné.

La campaña «de promoción directa» para las siete figuras de calidad del Bierzo está en fase de preparación, explicó el consejero de Agricultura, que resaltó lo importante que es para Castilla y León contar con «una comarca con condiciones excepcionales» para la agroalimentación como es el Bierzo. Todo «un motor económico con dos centenares de empresas en el sector que mueven 40 millones de euros. «Si hay un sector que debe tirar del Bierzo en el futuro es el setor de la agricultura», enfatizó durante su intervención. Y el objetivo, recordó, —como después subrayaría Sánchez Torné al recordar la importancia de que el valor añadido repercuta en el sector— es que los productos del campo berciano lleguen a los canales de distribución.

El consejero, que llegó a Ponferrada acompañado por el jefe del Servicio Territorial de Agricultura, Fidentino Reyero, desgranó durante su intervención los seis retos a los que se enfrenta el sector como motor de desarrollo rural, de una parte, y como un segmento de la economía que debe encontrar un equilibro en la cadena alimentara entre la producción, la transformación y la comercialización de sus productos, siempre en diálogo con las organizaciones profesionales y otras instituciones.

«Lo primero que necesita la agricultura es incrementar su productividad y eso pasa por la innovación y la investigación», afirmó, de ahí la estrategia de la junta para promover la transferencia de conocimientos tecnológicos al sector. El segundo reto es el de la competitividad en mercados sujetos a aranceles y que obligan a adoptar el uso de nuevas tecnologías. En esa línea situó la necesidad de completar la modernización de los regadíos y promover la eficiencia energética.

El tercer reto del sector es «cómo luchamos contra el envejecimiento» de los agricultores. Carnero reconoció la necesidad de ofrecer una imagen positiva del sector para lograr la incorporación de los jóvenes, que ahora mismo tienen dificultades de acceso a la tierra y la propiedad y están sujetos a una serie de cambios normativos, además de sufrir la inestabilidad de los mercados y de la climatología. Pero el campo, y la pandemia lo está demostrando, «es un sector estratégico» que «puede ponerse medallas por estar dando de comer a todo el mundo». Y eso, añadió «hay que decírselo a los jóvenes». Carnero aseguró que el último año se han incorporado al sector 823 jóvenes, 40 en el Bierzo, frente a los 18 del año pasado en la comarca.

Cambio climático

El cuarto reto es el de la igualdad, afirmó Carnero. De ahí la estrategia de la Junta para apostar por el emprendimiento de la mujer rural. El presidente Mañueco anunciará próximamente la nueva estrategia. El quinto pasaría por mejorar la imagen del sector y «hablar de lo bueno que tiene» la agricultura o la ganadería. «Malamente podemos atraer a los jóvenes si hablamos mal del sector», manifestó.

Y el sexto reto, resumió el consejero, tiene que ver con el cambio climático. La Junta tiene intención de incrementar en un 20 por ciento los seguros agrarios durante esta legislatura. Pero también defiende, en estos días que se negocia en Europa, una Política Agraria Comunitaria que «compense de las obligaciones medioambientales» a los agricultores.