Mañueco tiene ya los votos para presidir la Junta sin cerrar el reparto de cargos con Vox

La segunda investidura como presidente de la Junta de Castilla y León de Alfonso Fernández Mañueco (PP), en este caso con la suma de apoyos de su partido (31) y de Vox (13), se celebrará el 25 o el 28 de marzo, en una única sesión, que está a expensas de que ambos partidos cierren el acuerdo sobre la estructura del futuro gobierno de coalición.

El nuevo presidente de la Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán (Vox), llamó ayer a Mañueco para comunicarle de forma protocolaria que, tras la ronda de contactos con los grupos parlamentarios y el apoyo manifestado por el PP y Vox, cuenta con la «mayoría suficiente» para ser investido de nuevo como presidente, aunque no ha concretado aún la fecha para ese momento.

Previsiblemente la Mesa de las Cortes y la Junta de Portavoces se reunirán el miércoles de la próxima semana, según indicaron fuentes parlamentarias, aunque dependerá de los avances en la negociación para que la investidura se convoque en una u otra fecha.

El presidente de las Cortes se reunió el jueves, de menor a mayor representación parlamentaria, con los representantes de Ciudadanos, Por Ávila, Unidas Podemos, Soria Ya y Unión del Pueblo Leonés, mientras que ayer ha conversado con los portavoces de Vox, el PSOE y el PP.

En sus respectivas comparecencias, los representantes de Vox y el PP se han referido al acuerdo programático y de reparto de responsabilidades que han suscrito y se han mostrado dispuestos a que la legislatura y el Gobierno echen a andar lo antes posible, con una estructura que darán a conocer en los próximos días y sobre la que han negado discrepancias.

merma DE DINERO para los grupos

El portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León y futuro vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, y el portavoz del PP, Raúl de la Hoz, anunciaron ayer que la asignación económica que reciben los grupos parlamentarios será reducida, aunque no cuantificaron la disminución y si una de las vías para conseguir ese objetivo será aminorar los incrementos de retribuciones aprobados en febrero pasado para la Mesa de las Cortes.

En la rueda de prensa posterior a su reunión con el presidente del Legislativo y compañero de partido, Carlos Pollán, dentro de la ronda de contactos previos a la sesión de investidura, García-Gallardo desligó a su partido del acuerdo para incrementar las retribuciones de los miembros de la Mesa. «Es completamente ajeno a Vox, se ratificó hace unos días sin intervención de Vox», subrayó.

El portavoz de este partido defendió que el acuerdo con el PP implica la «reducción del gasto político superfluo» y en este contexto enmarcó la bajada en las cantidades que dispondrán los grupos parlamentarios para su funcionamiento y representación de los ciudadanos.

Sin embargo, remitió a los «próximos días» para conocer en concreto en qué porcentaje disminuye esa aportación a los grupos parlamentarios, pero sí reconoció que entre las medidas figurará la merma en el número de procuradores que tiene cada grupo liberados para la representación política, dado que en las Cortes la mayoría de los parlamentarios no tienen una retribución fija sino pagos por asistencia a plenos y comisiones, así como dietas y kilometraje.

«Gente de palabra»

El portavoz del PP, Raúl de la Hoz, enmarcó también esta decisión en el punto 11 del acuerdo encaminado a reducir el gasto institucional y «gasto público ineficaz», porque son «gente de palabra».

«Veremos de qué manera los trasladamos también a las Cortes y también a la asignación a los grupos parlamentarios», ha añadido De la Hoz, convencido de que en el PP y en Vox existe una «voluntad conjunta» de «dar cumplimiento a este compromiso de reducción de gasto», que ha reconocido también «puede conllevar» la disminución del número de procuradores autonómicos que tienen un sueldo para desarrollar su actividad representativa en exclusividad.

Preguntado por estas intenciones, el líder del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, alertó de los intentos de «socavar la democracia» que observa en quienes se plantean reducir la posibilidad de que los procuradores ejerzan la representación de los ciudadanos que les han votado.

En la rueda de prensa posterior a su encuentro con el nuevo presidente de las Cortes, Carlos Pollán (Vox), Tudanca afirmó que el tema de las retribuciones no ha sido objeto de esa reunión, pero preguntado por lo anunciado por Juan García-Gallardo (Vox) minutos antes, el socialista ha lamentado que hayan prendido en el debate argumentos de la «extrema derecha» que vincula con la «antipolítica» y el cuestionamiento del ejercicio con «dignidad» de la actividad política.

El jefe de la oposición en Castilla y León lamentó también que se cuestione el incremento aprobado para la Mesa de las Cortes y a la vez no se haga lo mismo respecto al aplicado para los miembros del Gobierno autonómico, ambos vinculados en opinión de Tudanca a la subida prevista en los Presupuestos Generales del Estado.