Germán Pérez, la estrella del Galileo

La noche cultural de Madrid de las últimas décadas no hubiera sido la misma sin Germán Pérez (Alija del Infantado, 1950-Madrid, 2021). Distinta, seguro y, en concreto, el jazz en directo, uno de los grandes activos en la capital, tal vez hubiera tardado en arrancar, aunque lo que es seguro es que con la desaparición de este leonés irrepetible se ha quedado huérfana. Este miércoles, el sector musical, la noche que respiraba vida cultural en Madrid, artistas, amigos, compañeros y familia, le rindieron homenaje en la sala Galileo Galilei, un local referente que Germán Pérez regentó hasta el último momento junto a su socio Ángel Viejo, y que con la Sala Clamores, tratándose de arte, viene al caso calificar de auténticas obras maestras profesionales que siempre llevarán su firma y buen hacer y con las que deleitó al público y catapultó a artistas de todos los pelajes.

Si el escenario estuvo lleno de emoción, el resto de la sala no se quedó a la zaga, demostrando que el carisma de Germán Pérez era tal que su recuerdo brillará como una estrella eterna, en este caso para siempre en su querido Galileo Galilei. Santiago Alcanda, periodista clave de la música en España, junto al propio Ángel Viejo, socio del alma, pusieron las palabras a un evento en el que como le hubiera gustado a Germán Pérez reinó la música y la actuación. Grandes nombres como Andreas Prittwitz (palabras mayores del jazz), Red House Revival, el trompetista cubano Manuel Machado, Rebeca Jiménez o Javier Cansado, de Faemino y Cansado (siempre imprescindibles en la programación de Pérez y Viejo), junto a otros artistas, pusieron su arte sobre el escenario, recordando que Germán Pérez fue tan divulgador cultural de estilos como el jazz o el flamenco, o cualquier expresión artística de calidad, como promotor y apoyo real de nombres emergentes, que encontraron en él un lugar para intentar el sueño de ser artistas.

Su mujer Gloria Isabel López Mediero, que también intervino, y los hijos Germán jr y Borja, los hermanos Ángela, José Luis, Avelino, Teresa, Alfonso y Victoria asistieron a un encuentro llamado a consolidarse y que esta vez se enmarcó en el inicio del Festival de Jazz de Madrid. No pudo asistir Herminda, otra de sus hermanas, residente en Londres y que trabajó muchos años con él en Clamores. Si Galileo Galilei veía estrellas, ahora ya se sabe que una que brilla a ritmo de jazz se llama Germán Pérez.