Pallarés. Imágenes de ayer y hoy de un museo centenario

Es un barco varado en Santo Domingo en ese más que repóker de edificios emblemáticos en la plaza más céntrica de la ciudad. Y su uso no se ha detenido. Por eso, que Pallarés cumpla 100 años significa muchos tiempos y ritmos de León. Termina 2022 y la celebración se traduce en disfrutarlo por fuera y por dentro, como se hizo este martes, cuando Ester Muñoz, delegada territorial de la Junta de Castilla y León, inauguró una nueva exposición fotográfica en el Museo de León, que es lo que es ahora el  Edificio Pallarés.

El acto también sirvió para dar a conocer el nombre de los premiados en el concurso de fotografía celebrado con motivo de este aniversario y por el que ha resultado galardonado Germán Bécares y el accésit para Belén Sánchez. Respecto a las mejores evocaciones históricas, los ganadores fueron José Fernández y Julián Fernández, Fernando Gago y Juan Rafael Álvarez. Decenas de fotografías relatan y retratan así la historia de esta singular edificación que cumple cien años.

Hasta el próximo 5 de marzo se podrá visitar esta exposición que pretende ser un homenaje a la biografía de uno de los más singulares y distintivos edificios de León, por su ubicación, forma y por las actividades que ha acogido. En esa muestra pueden conocerse vestigios arqueológicos recuperados en el propio solar de Pallarés, desde época romana hasta la actualidad, así como una amplia colección de fotografías históricas de ese lugar tan representativo de León como es la plaza de Santo Domingo, desde siempre escoltada por el ‘navío varado’ de Pallarés.

Se repasa también la trayectoria de la familia Pallarés y del arquitecto del edificio, Manuel de Cárdenas y se exhiben distintos objetos pertenecientes al antiguo bazar o ferretería, muchos de ellos aportados por los trabajadores jubilados del bazar en una ‘vitrina abierta’ a sus contribuciones cuyo funcionamiento e incremento durará toda la exposición. También cuenta con referencias a su funcionamiento como Salón de las artes, gracias a su anterior propietario, la Diputación Provincial.

«Este edificio fue el primer gran centro comercial que hubo en la provincia, era única y exclusivamente comercial. Era una ferretería y esta exposición recuerda toda esta historia vivida por los leoneses en el último siglo”, recordó Ester Muñoz.

Del mismo modo, Muñoz fue la encargada de hacer público el nombre de los citados ganadores del concurso fotográfico convocado también para festejar este centenario, especificando premio y especialidad.

Mejor foto actual

El ganador a la mejor fotografía actual fue Germán Bécares y el accésit para Belén Sánchez Campos. Respecto a las mejores evocaciones históricas, los ganadores fueron José Fernández García y Julián Fernández Honrado, Fernando Gago Ballesteros y Juan Rafael Álvarez.

Estas fotografías ganadoras, con el resto de las participantes, también forman parte de esta exposición temporal. «Les doy la enhorabuena a los premiados por estos reconocimientos, pero también les agradezco sus fotografías ya que están contribuyendo a hacer historia de León con ellas», ha señalado Muñoz.

La exposición supone un recorrido en imágenes y paneles de texto en los que se explica la historia de Pallarés, en este caso la protagonista y estrella del Museo de León que dirige Luis Grau.

Un buque en el centro

Sea por su ubicación o por su tan distinta forma, con esa volumetría de buque; sea por su trayectoria, de siempre dedicada a una acogida hospitalaria, primero a los clientes de un bazar y ahora a los visitantes de exposiciones y del Museo, Pallarés lleva cien años entre los leoneses.

En época romana, la ubicación de Pallarés coincidía con el talud en que se aupaba el acantonamiento amurallado.

Este espacio extramuros se dedicó posiblemente a huertas del rey en la Edad Media y a mercado ganadero o rastro desde el siglo XVI, afectado por las insalubres aguas y vertidos que describe la Pícara Justina, convirtiéndose en pósito municipal y alhóndiga desde mediado el XVIII.

Con el ensanche decimonónico, el solar adquirió gran valor urbanístico, pasando de marginal a céntrico, en la epicéntrica plaza de Santo Domingo. Finalmente el edificio Pallarés fue construido en 1922 como almacén y comercio ferretero por el arquitecto Manuel de Cárdenas, único inmueble de entonces dedicado en exclusiva a una actividad mercantil que, durante cerca de sesenta años, se dedicó a grandes almacenes comerciales.

La obra de Cárdenas se enfrentó a una manzana propia muy alargada que obligó a una configuración distintiva y una fachada semicilíndrica repleta de ventanales.

Cerrado el comercio, la Diputación provincial adquirió el edificio en los ochenta, convirtiéndolo en Salón de las artes. En 1993 se planteó una reforma y ampliación que liquidó parte de lo proyectado, pero nunca se llevó a cabo. Tras la propuesta del propio Museo en 1997 y distintas deliberaciones y contrapropuestas, el Ministerio de Cultura adquirió por fin Pallarés en 2001. El equipo del Museo elaboró entonces el proyecto museológico y en 2007 el primero de los museos leoneses abrió al fin sus puertas en esta nueva y definitiva sede.