Los clubes poderosos exigen una categoría intermedia y el Logroñés el ascenso directo
«Lo que nos estamos jugando no es solo este año porque hay un corto y un medio plazo y el más duro será el que viene y cómo quedará todo económicamente, y si se debilita los más perjudicados serán los más poderosos e inversores que han metido mucho dinero en Segunda B», mantiene el director general de la Cultural Felipe Llamazares.
La propuesta de la Cultural de crear una categoría intermedia entre la Segunda División y la Segunda B es la preferida, junto a otros clubes poderosos de la categoría de bronce como el Badajoz. Es la contestación a la intención expresada por un amplio número de clubes de la categoría de bronce -por encima de la treintena-, que defendían en una carta remitida a la Federación Española su deseo de dar por concluida la temporada sin descensos ante la crisis sanitaria generada por el coronavirus.
«Desde mi punto de vista es una carta equivocada porque se piensa sólo en el árbol y no en el bosque que le rodea. No se puede pensar en salvarse cada uno del descenso, sino que se ha de caminar hacia una profesionalización mayor de todos los clubes, que no existe, para no debilitar la industria del fútbol ante las medidas excepcionales que serán necesarias», recalca Llamazares.
Otros clubes como el Logroñés, líder del Grupo II, pide el ascenso directo.