Mamá Tere: sabor de madre

Donde antes se situaba un bar al que jóvenes y adolescentes a jugar al duro con los cachis de lo que fuese, hoy hay un templo de la gastronomía y la hostelería. Remodelado y renovado hasta tal punto que no queda ni rastro de lo que fue, es un punto de referencia.

Desde el exterior Mamá Tere llama la atención de todas las miradas por su espectacular decoración de estilo tropical.

Sobre lo que tiene apariencia de invernadero tropical reina un gran letrero luminoso con el nombre del restaurante, coronado por una cabeza gigante de rinoceronte azul cuyo cuerno es plateado. Una gran propuesta, una cocina inspirada en lo autóctono, con un producto mimado hasta el final de la mano de ganaderos y agricultores, Mamá Tere es uno de los locales de referencia en la actualidad en el panorama gastronómico leonés

Se trata de una oferta que se basa fundamentalmente en los productos locales, afinados y llevados al fuego por Alexander Morten que configura dulces y salados en una oferta que combina sus creaciones culinarias con numerosos vinos de la tierra y la coctelería de autor de Pablo del Blanco que gira en torno a sabores y texturas en consonancia con una decoración y una puesta en escena para nada convencionales.

Mamá Tere no puede faltar en la elección más acertada para el cliente exigente.

Puede parecer que están hechos para compartir, pero resultará extremadamente difícil separarse del huevo poché en panecito gratinado. ¿Todavía no has probado nuestra carne de vaca rubia gallega? ¿A qué esperas?

Si ya has venido al Mamá Tere sabrás muy bien que no hay dos rincones iguales. Las mesas, las sillas, las lámparas, las baldosas e incluso las paredes cambian ha medida que te adentras en el restaurante. ¿A qué esperas para descubrirlo? No lo dejes más.

Mamá Tere. Plaza Mayor, 26- (987) 091 258