Diario de León

El BCE quiere que la política de la zona euro apoye sus medidas contra la crisis

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

j. a. bravo | madrid

«Preocupación» e «incomodidad». Así es como definen diferentes analistas el estado de los miembros del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ante la respuesta que deben dar a la posibilidad de una nueva crisis económica mundial, con especial incidencia en una zona euro dependiente de las exportaciones y donde la locomotora alemana está a un paso de entrar en recesión. Por eso en su última reunión, celebrada el 25 de julio y cuyas actas se publicaron este jueves, subrayaron «la necesidad de una orientación muy acomodaticia de la política monetaria durante un período de tiempo prolongado». Y es que a unos «riesgos para el entorno externo» que «siguen siendo negativos», se unen unas tasas de inflación «persistentemente por debajo de los niveles en consonancia con su objetivo», próximo al 2% aunque inferior. El análisis que dibujó Philip Lane, economista jefe del BCE, no fue halagüeño, aunque los consejeros insistieron en que el comunicado del supervisor debía establecer «un cuidadoso equilibrio» entre dar señales «indebidamente negativas» sobre la economía y, por otro lado, «contrarrestar eficazmente la preocupación de algunos observadores» de que no tienen los elementos «necesarios» para subir precios.

De ahí que cuando el presidente del BCE, Mario Draghi, compareciera después ante la prensa, subrayara que «se actuará con determinación si la inflación es inferior o más alta del objetivo». Pero como ni el aumento de los salarios ni las «crecientes» presiones de los costes han elevado las perspectivas del índice de precios de consumo —las proyecciones señalan el 1,4% para este año y el 1,5% para 2020—, el consejo de gobierno abrió la puerta a un cambio «futuro» en esa meta inflacionista. No obstante, se destacó también que llegado el caso «no debía emplearse como una medida de política aislada», sino que debía «vincularse a una revisión más amplia de la estrategia de política monetaria» del Banco Central precisamente para «garantizar su coherencia».

Y es que la mayoría de los consejeros coincidió, al hablar de qué medidas podía tomar el BCE —no solo ante la inflación sino también frente a una posible crisis que se ve más cercana, con riesgo de «contagio» de la «debilidad» de la industria a los servicios y la construcción—, en que «las diversas opciones deben considerarse como un conjunto», esto es, combinar los instrumentos que se elijan con «importantes complementariedades y sinergias» pues la experiencia ha demostrado que concertar recortes de tipos y compras de activos es «más eficaz que una serie de medidas selectivas». Asimismo, pidieron que a la hora de diseñar esas actuaciones se valore su «eficacia relativa» ante «futuros imprevistos».

tracking