Correa declara que su dinero en Suiza estaba en la misma cuenta que la del rey

Recuperado de la «urgencia vital» que le mandó el miércoles al hospital, Francisco Correa declaró ayer ante el tribunal que juzga la pieza de la trama de corrupción del PP relativa a la visita del Papa a Valencia.

El líder confeso de la trama corrupta no tenía intención de hablar, pero antes de ir al hospital por una hernia inguinal cambió de opinión. Quiso dejar claros algunos aspectos de la causa y salió a la palestra ante la «parcialidad» con la que, a su juicio, se movían los magistrados de la Audiencia Nacional.

Correa entró de lleno en la rigurosa actualidad judicial y se refirió al dinero ilícito obtenido de la corrupción y que ocultó al fisco en bancos de Suiza y Mónaco. Relató que su asesor financiero le presentó al administrador de cuentas suizo Arturo Fasana, y éste le dijo que su dinero se transferiría a la cuenta ‘Soleado’, «por donde pasan las grandes fortunas del país, incluido la del rey de España», refiriéndose al rey emérito don Juan Carlos.

A respuestas de un abogado de la defensa, Correa contó que fue el yerno del expresidente José María Aznar, Alejandro Agag, quien le puso en contacto con el asesor fiscal José Ramón Blanco, y éste le explicó que le iba a organizar sus temas personales. Le creó una estructura para sus finanzas y le llevó a Ginebra para presentarle a Fasana. «Como tenía dinero en Suiza y Mónaco, y no era dinero declarado en España, (...) me lo presenta (a Fasana) y al (abogado) Dante Canónica. Nunca he declarado sobre este asunto porque he tenido miedo», admitió Correa.

Tanto Fasana como Canónica son dos de los investigados por la Fiscalía suiza desde 2018 tras aparecer en su despacho indicios de una transferencia del rey emérito de 65 millones de euros en 2012 a Corinna Larsen, con quien mantuvo una «relación», según ésta.

Tras esta confesión, mostró ayer su incredulidad ante el hecho de que Fasana fuera puesto en libertad tras su detención en 2009 —una vez que declaró ante el juez Antonio Pedreira, ya fallecido— mientras que él está en prisión. Y refiriéndose al rey emérito, indicó que cuando él está en su celda en Nochebuena y escucha que «la justicia es igual para todo el mundo» le entran «ganas de llorar».

«Llevo años sin ver a mi hija, y estos señores con dinero en la misma cuenta que yo están en libertad», resaltó mientras era interrumpido en varias ocasiones por el presidente del tribunal, José Antonio Mora, para requerirle que se centrara en los contratos de la visita del Papa.

Quien sí se explayó sobre este asunto fue Juan Cotino. El expresidente de Les Corts Valencianes, a quien la Fiscalía le pide 11 años de prisión, se desvinculó de la organización y adjudicación de los contratos del evento y aseguró que él sólo se encargó de coordinar a los grupos de voluntarios en materia de seguridad. Dijosólo conocía a Alvaro Pérez, ‘el Bigotes’, de los actos del Partido Popular.