Los españoles creen que las pymes y no los políticos son las que relanzan la economía

Lo tienen claro. Las pequeñas y medianas empresas del país son las artífices de la recuperación económica española, azotada por dos años de pandemia. Son las pymes y no los políticos ni las administraciones, el Gobierno central, los gobiernos autonómicos, la patronal o los sindicatos los que están relanzando la economía.

Lo piensa más de la mitad de los españoles encuestados por DYM para Diario de León. El 80 % de las personas que han participado en el sondeo opina que son los pequeños y medianos empresarios los que están favoreciendo en mayor grado la recuperación de la economía en la pandemia, en la que aún estamos sumergidos, ahora con la sexta ola de covid. Esta percepción sobre quienes realmente están haciendo algo es generalizada entre los votantes de todos los partidos, es transversal.

Entre los encuestados no se percibe que algún partido esté favoreciendo la recuperación económica, aunque el mejor posicionado, con un 16,1 %, es el PSOE seguido de Podemos, que obtiene un 10,9 %. Ni los propios votantes de cada uno de los partidos creen que lo estén haciendo. En cambio, todos ellos consideran que la inflación va a tener un impacto negativo y va a hacer más difícil la salida de la crisis económica provocada por el coronavirus. Está convencido de ello el 75,3 % de los encuestados.

También es mayoritaria la opinión de quienes señalan que el IPC disparado va a afectar mucho o bastante a su economía doméstica y que tendrá un impacto directo en sus hogares. De esa opinión es el 61,8 % y lo creen los votantes de todos los partidos políticos.

Tres cuartas partes de los consultados están a favor de que se vacunen del covid-19 los niños menores de 12 años. Lo defiende el 74,5 % (baja al 70 % entre los padres con hijos en esa franja de edad) y sólo un 12 % se opone. Los votantes de Vox son los que más se niegan.

Ese porcentaje baja drásticamente cuando se pregunta si impedirían a los hijos de los antivacunas acudir a la escuela si no han recibido la inyección. El 35,8 % los dejaría sin ir a clase frente al 46,2 % que sí dejaría que fueran.

El 44,3 % de los encuestados creen que en Cataluña se debería impartir un 25 % de las clases en español y casi tres cuartas partes que el Gobierno de España debería exigir de forma inequívoca a la Generalitat que cumpla la sentencia del Tribunal Supremo.