La fuente de La Granja se derribará para dar lugar a un área de gimnasia y saltos

Hace años que no funciona, ni se arregla, ni siquiera se limpia. Apenas el esqueleto lleno de desconchones, pintadas y basura arrojada dentro recuerda al elemento con el que, el 24 de julio de 1985, se coronó la inauguración. La factura reseña que se gastaron 6 millones de pesetas, dentro de los cerca de 100 invertidos en los 60.000 metros cuadrados de zona verde, para enseñorear el parque de La Granja. Pero ahora, la fuente se ha convertido en un adorno estropeado que desaparecerá del paisaje. El Ayuntamiento, como parte de una de las propuestas presentadas por la UPL para apoyar el presupuesto, derribará la estructura de hormigón para convertir el espacio en un área de aparatos de gimnasia y salto de obstáculos.

El proyecto se sustenta en los 60.000 euros reservados en las cuentas municipales de este ejercicio para atender el compromiso con los leonesistas. Los fondos servirán no sólo para la demolición y posterior retirada de los escombros y chatarra de la fuente, cuyo sistema de surtidores está inutilizado por completo, sino que recoge el coste del adecentamiento del terreno y la colocación de los nuevos elementos. El área, que se ubica en el centro de las instalaciones públicas de La Granja, se dividirá en dos espacios complementarios: uno con aparatos de calistenia, como los que hay en otras zonas verdes de la ciudad, como al lado del skatepark de Papapalaguinda o en Eras de Renueva; y otro de parkour : la disciplina física que se basa en sortear obstáculos dentro de un recorrido mediante saltos y piruetas.

La zona de parkour estrenará estos circuitos específicos dentro de León. Hasta ahora, los aficionados a este deporte se reparten por la ciudad, que toman como escenario idóneo para sus saltos y piruetas, aunque tienen como uno de los puntos de reunión el entorno del monumento a los Reyes Leoneses, a la entrada del puente de Los Leones desde la acera derecha de la glorieta de Guzmán. Para replicar obstáculos como los que surgen en el mobiliario público, el proyecto dibuja una serie de barras atravesadas en paralelo al suelo y elementos verticales para propiciar la acción de los aficionados a esta modalidad urbana. En las inmediaciones, se colocarán también los aparatos de calistenia dentro de un completo circuito para el ejercicio físico.

La colocación de este área se suma a la otra intervención prevista para el parque de La Granja, donde de manera reciente se intervino para hacer pequeñas adecuaciones. Con el buen tiempo se ejecutará el campo de fútbol de hierba artificial, adjudicado en octubre con una factura asociada de 201.290,89 euros.