La ORA propone vincular las dos horas gratis de los sábados a hacer una compra

La gratuidad de las dos horas en el estacionamiento de pago los sábados por la mañana no pasa por el momento de una anécdota. La limitación de la medida de la ORA tan sólo a quienes saquen el ticket en las máquinas expendedoras, sin posibilidad de beneficiarse las operaciones mediante el teléfono móvil hace que apenas llegue por ahora al 35% de los vehículos. El resto no lo conoce o prescinde de ello al funcionar con las app, una opción a la que se apuntan ya seis de cada diez usuarios. La incidencia derivó ayer en la propuesta, planteada en el consejo de administración de la empresa mixta, para eliminar la medida y sustituirla por una alternativa vinculada al comercio: un sistema por el que la gratuidad irá ligada a un bono que extenderán los comerciantes a sus clientes.

La decisión queda pendiente para la próxima reunión de Eulsa, la mercantil en la que el Ayuntamiento cuenta con el 57% del accionariado y el 43% restante queda en manos de la empresa privada Empark. El planteamiento cuenta con el beneplácito del PSOE, pero debe sumar el voto favorable del PP o, al menos, de la UPL: los dos grupos políticos que, junto a Cs, forzaron la gratuidad de las dos horas al promover una moción conjunta que se aprobó en el Pleno. Si sale adelante la medida en la reunión de finales de febrero, la puesta en funcionamiento podría comenzar a lo largo del mes de marzo o, como tarde, en abril.

Antes, tendrá que armarse todo el sistema de bonos. La propuesta, que ayer se explicó de palabra pero quedó pendiente de pasarse por escrito a los consejeros, pasa por vincular a los comerciantes del área de influencia de la ORA, que se extiende no sólo por el centro sino por La Chantría, San Claudio y el entorno del Auditorio Ciudad de León. Cada uno de los negocios se apuntaría de forma voluntaria, sin que les supusiera ningún coste. Los comercios adheridos contarían con un paquete de bonos para ofrecerlos como contraprestación a las compras. Los recibos irían asociados a un código de validación para que los clientes lo activaran un sábado por la mañana, sin opción de que pudiera canjearse cualquier otro día de funcionamiento y con un único uso asociado a una matrícula. Para evitar la picaresca, como se reseñó, se podría controlar incluso las matrículas a las que beneficia cada empresa para comprobar que no siempre son las mismas, sino que atienden a los criterios que fundamentan la idea. Fuera de estos márgenes no cabría beneficio para el resto de los usuarios que tan sólo utilicen el estacionamiento para dar después un paseo o hacer una gestión.

El plan, como argumentaron los responsables de la ORA, conseguiría de una manera efectiva incentivar las compras durante la jornada de los sábados, que fue el argumento que defendieron el PP, la UPL y Cs cuando presentaron la moción, en la que se incluía también la exención de la tasa de terrazas y el aplazamiento del tributo de recogida de basuras. Pese a que ya entró en vigor el 3 de octubre, la gratuidad de las dos horas no ha logrado subir en todos estos meses del 36% de las operaciones que se contabilizan los sábados por la mañana. El dato avala que no se ha cumplido el objetivo, como defienden los rectores municipales. Aunque desde la oposición se insiste en que la negativa a que pueda gestionarse la gratuidad de las dos horas mediante la aplicación del móvil, lo que conllevaría un gasto adicional para la empresa según los gestores, hace que no haya tenido la penetración que se esperaba cuando se propuso.

Por el momento, las dos primeras horas gratis de aparcamiento los sábados por la mañana, dado que por la tarde no hay servicio, se mantendrán, a pesar de que el acuerdo plenario establecía su duración hasta el 31 de diciembre. No han variado los efectos de la pandemia en el comercio, ni en la ciudadanía en general, sino que incluso se han incrementado. Ahora, será el consejo de administración de Eulsa, que sumó unos beneficios netos de 584.755,71 euros en 2020, la mitad de lo previsto, el que decida.