Sabero no olvida a los suyos

El pleno municipal de Sabero aprobó por unanimidad de todos los grupos políticos, tomar parte en la convocatoria del Instituto Leonés de Cultura con destino a actuaciones dentro del programa «R» –Recuperar, Regenerar, Reactivar–, en el ejercicio actual para el proyecto de Recuperación de la Casa de Máquinas del Pozo Herrera I, por un importe de 300.000 euros. La principal actuación se centrará en la recuperación de la Casa de Máquinas, un elegante edificio construido en piedra de cantería, que en su día albergó la maquinaria que permitía la subida y bajada de la jaula al pozo.

La actuación presentada está incluida dentro del proyecto global Valle del Recuerdo, un homenaje a los mineros muertos en la minería de Castilla y León, creando un espacio definido por el Castillete del Pozo Herrera, el edificio de la Casa de Máquinas y el bosque jardín que lo rodea.

Esta iniciativa municipal se complementa con la iniciada hace pocos meses, a través del Grupo de Acción Local Montaña de Riaño, dentro del Plan de Sostenibilidad Turística de la Montaña de Riaño, para el que cuentan con una ayuda de 140.000 euros.

La obra solicitada pretende acondicionar el emblemático inmueble para que sirva como lugar de exposición y experiencias en torno al duro trabajo del minero y sus consecuencias mortales.

Francisco García, alcalde de Sabero, señala que la Casa de Máquinas, su bosque jardín y el Castillete, serán una zona abierta a las personas para que puedan tener un espacio de conocimiento y reconocimiento de la dureza de la mina y un lugar de recuerdo a los que dejaron su vida en ella.

Obras a ejecutar

Las obras en esta fase se centran en la Casa de Máquinas, con la sustitución de su actual cubierta de fibrocemento y la renovación de toda la carpintería exterior, ahora casi inexistente a causa del vandalismo, como acciones principales. De igual forma se actuará sobre el solado de la planta principal y sus zócalos, restaurando y conservando las baldosas y azulejos existentes, pero dejando los espacios vacíos a consecuencia del robo como cicatrices y señales de lo que nunca debió ocurrir.

Algo similar se realizará con las grandes máquinas que aún existen, con una intervención sencilla que implique su limpieza y la eliminación del óxido, pero sin una restauración integral, lo que las convertirá en sarcófagos industriales custodios del recuerdo de lo que fueron.

El sótano del edificio se acondicionará para albergar otros elementos de la museografía posterior.

En otras fases del proyecto, para las que ya existe una subvención del Plan de Sostenibilidad Turística de la Montaña de Riaño, se abordará la recuperación del castillete y el bosque jardín.