La galería de Orellán suma un mes cerrada por «avería eléctrica»

j. c. f. | Orellán

La oscuridad se ha vuelto a apoderar de uno de los principales atractivos turísticos de Las Médulas. La galería de Orellán, un espacio en el que el visitante se puede adentrar en las entrañas de la vieja mina de oro romana, permanece cerrada al público desde los primeros días del mes de enero, lo que ha generado ‘mal sabor de boca’ a no pocos visitantes que se han acercado al paraje Patrimonio de la Humanidad y se han tenido que marchar sin poder realizar la visita completa.

La única explicación a esta circunstancia que reciben los visitantes se encuentra colgada en la puerta de acceso a la galería. Allí en un cartel —en castellano e inglés— se informa de que esta zona se encuentra «Cerrada temporalmente por avería eléctrica». Una avería que según el gerente de la empresa seleccionada por el Ayuntamiento de Borrenes para explotar la galería de Orellán está motivada por la acción de los vándalos. «De una pedrada se han cargado cuatro placas solares», señala José Potes, de la empresa adjudicataria de este servicio.

Una piedra y cuatro placas solares en cuya sustitución se ha empleado aproximadamente un mes, que habrían frustrado las expectativas de no pocos visitantes. Con todo Potes apunta que la solución es inminente. «Creo que el lunes ya ponían las nuevas», señala, con lo que la galería podría volver a ser visitable. Una zona en la que desde la Secretaría de Estado de Cultura, y con la supervisión de la Fundación Las Médulas, se invirtieron en torno a 82.000 euros en el año 2012 para mejorar la iluminación interior—a través del sistema ahora, ‘supuestamente’ saboteado, y que, además permitió instalar una señalización interpretativa que guía al visitante por ese recorrido subterráneo hasta recuperar la luz del día en el ‘balcón’ con vistas a los picachos rojos’, así como ampliar la zona visitable con otros 30 metros de galerías visitables—.

Según Potes, la inversión a la que deberá hacer frente para reponer las placas solares dañadas podría superar los 3.000 euros. Una cantidad que, según señala, «en un primer momento, aportaré de mi bolsillo», si bien, confía en que el «punto se llevé a Pleno» —a este periódico le ha sido imposible contactar con el regidor de Borrenes, Eduardo Prada, para conocer su parecer al respecto, pese a haberlo intentado a lo largo de la jornada de este sábado—.

Según el representante de la empresa adjudicataria de la gestión de las galería de Orellán, a lo largo de este mes en que ha permanecido cerrada al público esta zona de la vieja mina de oro romana, «han sido varias las excursiones a las que le hemos tenido que decir que no podíamos abrir porque con las placas solares así no cargan las baterías y no hay una iluminación suficiente».

A los trastornos de los visitantes hay que sumar la situación de las personas que tiene contratadas a lo largo del año la empresa para explotar turísticamente la galería de Orellán. «Son dos personas que hemos tenido que mandar para su casa», confirma Potes.

El horario de apertura al público de esta galería debería ser de lunes a domingo, en horario de mañana y tarde, con la excepción del martes, que el canal subterráneo debería permanecer cerrado al público, según se apuntó en el momento de culminar la reforma financiado por la Secretaría de Estado. Una situación que se ha visto trastocada, para desgracia de los visitantes, por este cierre decretado por la «avería eléctrica», y cuya solución parece ‘haberse eternizado’.

Hay que recordar que este año Las Médulas, en las que la galería de Orellán es un enclave destacado, están celebrando el vigésimo aniversario de su reconocimiento por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. Para ello se están ultimando una serie de actos que tendrán como colofón una jornada sobre la gestión de parajes culturales.