Peón de Arriba, de pueblo abandonado a sede de un Erasmus de emprendimiento

Una placa, en nombre de la Corporación de Carracedelo y firmada por su alcalde, Raúl Valcarce, agradece a los descendientes de Peón de Arriba que haya sido posible su recuperación. Quién les iba a decir a aquellos antiguos vecinos de lo que fue un día un pueblo abandonado que sus antiguas casas recuperarían estos días la vida al aire libre, en un entorno natural, con estudiantes de diferentes países de Europa de un programa Erasmus sobre emprendimiento rural.

Gracias a la asociación Vuelo, creada hace dos años por Ana Laura Herrero, de León, para promover Erasmus y movilidad europea, así es. Peón de Arriba es sede durante una semana de una iniciativa que ha traído hasta el Bierzo a una treintena de estudiantes de diferentes países. Hungría, Portugal, Italia, Grecia, Bulgaria, Rumanía, Ucrania, España...

Su promotora eligió Peón de Arriba por todo lo que ha significado de recuperación de un pueblo abandonado, gracias al impulso del Ayuntamiento de Carracedelo. «Vine a ver el pueblo y me puse en contacto con la empresa que lo lleva, porque es precioso, y las instalaciones están nuevas. Encima, no molestamos a nadie», explica.

Durante estos días, el curso plantea iniciativas de educación no formal, sin seguir las pautas oficiales. Juegos, actividades... «Es muy participativo, como un campamento para adultos. Conoces gente de otros países, mejoras el inglés... Como somos de diferentes países aprendemos mucho. Un proyecto te lleva a otro», señala Laura.

En el curso participan estudiantes y también personas que ya trabajan. El único requisito, asegura la organizadora, es que les guste el emprendimiento.

Por eso está Mauro Oliveira, de cerca de Oporto, en Portugal, que quiere fundar con los años un proyecto ligado al turismo y la naturaleza. «Mi objetivo es aprender y llevarme algunas ideas para crear mi propio negocio», comenta. O Abraham Santos Lima, de Sevilla, que ya es emprendedor. En su caso, ha participado en diferentes iniciativas. «Este tipo de cursos ofrecen la posibilidad de emprender y sirven de experiencia». Sin embargo, y pese a su experiencia, nunca ha visto otro proyecto como Peón. «Es ilusionante», reconoce.

Para el alcalde, Raúl Valcarce, el curso demuestra la razón de ser del proyecto de Peón de Arriba y los muchos «sinsabores» para buscar la financiación. «Este es el objetivo, que hoy estén aquí estos jóvenes. Refleja un poco hasta dónde ha llegado la publicidad de Peón».