Diario de León

La acusación sostiene que el imputado llegó a usar un vibrador con la pequeña en uno de los episodios

La Fiscalía pide 10 años de cárcel por un abuso sexual en Ponferrada

El acusado estaba casado con la madre de la víctima que, en el momento de los hechos, tenía 12 años

Parte de los hechos tuvieron lugar en el monte Pajariel

Parte de los hechos tuvieron lugar en el monte Pajariel

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D. López - león
León

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La Audiencia Provincial de León pasará vista oral el próximo martes, a las 10.00 de la mañana, al caso que se sigue desde la Sección Segunda contra un berciano de 43 años, al que se acusa de un supuesto delito de abusos sexuales, que habrían sido cometidos sobre la hija de su esposa, una niña de 12 años de edad en el momento de los hechos. El fiscal solicita una pena de diez años de prisión para el acusado, que permanece encarcelado de forma preventiva desde febrero del 2.004, y al que se le imputa un delito continuado de abusos sexuales. También pide una prohibición de acercamiento a la víctima a una distancia no inferior a 500 metros por espacio de 15 años y otra pena añadida de quince meses de prisión por un supuesto delito de obstrucción a la justicia, así como una orden de alejamiento con su esposa a una distancia de 500 metros por una duración de cinco años. Desde enero del 2002 Los hechos que se juzgarán el martes datan de enero del 2.002. La niña no había alcanzado aún su madurez sexual cuando un día, fue requerida por el procesado para que le acompañara a la cochera, ubicada en otro edificio cercano al domicilio de ambos. Una vez en el interior del recinto, cerró la puerta diciendo a la víctima que lo hacía para que no les vieran, y le ordenó que se quitara los pantalones. En ese momento, la niña empezó a llorar, fruto de los nervios, mientras el imputado tapaba su boca y le quitaba las bragas. A posteriori, empezó a tocarla el pecho y después de apoyarla en una caseta de madera, la penetró vaginal y analmente, diciendo a la menor que si contaba a alguien lo sucedido, la mataba. Era la primera vez en que se la acometió sexualmente, de acuerdo al escrito de calificaciones del fiscal. A partir de la fecha, siempre según la correlativa de los hechos que aporta el ministerio fiscal, y aprovechando que la madre de la niña salía cuando acudía a su trabajo o a comprar, o buscando a propósito la excusa para quedarse a solas con la pequeña, la requería para mantener relaciones sexuales, que tenían lugar en la cochera, en la carbonera de la casa, en la vivienda, en el dormitorio del acusado, en el baño, en el salón o en la cama de los dormitorios del domicilio, e incluso en alguna ocasión, en su propio vehículo. En casa y en el coche Cuando los hechos tenían lugar en casa, y atendiendo al escrito de calificaciones que presenta el fiscal, el supuesto autor de los hechos obligaba a la hija de su compañera a ponerse de espaldas y, apoyando las manos en una mesa, la penetraba vaginal y analmente. En otra oportunidad, usando el coche, se sentó en el asiento del acompañante, y puso a la niña encima, penetrándola sin usar preservativo y limpiándose con un trapo sucio del vehículo. El último episodio tuvo lugar poco antes del día de Reyes del 2.004, cuando llegó incluso a golpearla para que se quitara los pantalones (siempre según el relato fáctico que presenta el fiscal). En todos los casos, el supuesto autor de los hechos exigía a la víctima que no contara los hechos a nadie, nunca usaba preservativo, si bien solía eyacular fuera de la niña, aunque en una oportunidad, llegó a introducir la mano en los genitales y en otra, usó un vibrador. Herpes genital Ya en abril del 2.003, cuando la niña aún no había cumplido 13 años, se le apreció un herpes genital en una revisión médica, a cuya realización se había opuesto el imputado, si bien durante el tiempo que duró el tratamiento, no hubo más actos sexuales.Una vez en prisión, el procesado realizó tres llamadas telefónicas en el transcurso del mes de febrero, para requerir a su esposa y madre de la niña que retirara la denuncia, y que la menor cambiara su testimonio «y que si no, se atuviera a las consecuencias». El fiscal solicita en su escrito «el mantenimiento de la situación de prisión para el presunto autor del delito, por concurrir los requisitos legales que motivaron la adopción de esta medida, al existir peligro fundado y concreto de ocultación, alteración y destrucción de fuentes de prueba relevantes para el enjuiciamiento. «Llegó a penetrar a la niña sin preservativo, y se limpió luego con un trapo sucio del vehículo» MINISTERIO FISCAL

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