La discordia se sube al Alvia
El presidente comarcal, José Luis Ramón, invita a los alcaldes de Ponferrada y Bembibre a comprobar las bondades del nuevo servicio. Pero López Riesco no ve clara la invitación y sí la intencionalidad política
El Alvia, el pasado lunes a su llegada a Ponferrada
A pesar de que queda mucho terreno por delante para las próximas elecciones tanto locales como generales, las proverbiales relaciones cordiales entre el alcalde de Ponferrada y el presidente del Consejo del Bierzo, José Luis Ramón, parecen empezar a enfriarse. El presidente comarcal sorprendió ayer a Carlos López Riesco con una invitación pública, extensiva también al regidor de Bembibre, Jesús Esteban Rodríguez, para viajar el próximo miércoles en el Alvia de Ponferrada a la villa del Boeza y comprobar así las bondades del nuevo y moderno servicio que desde el pasado día 15 cubre el trayecto hasta Barcelona. Con formal diplomacia, pero con un indisimulado desazón, el alcalde de Ponferrada no dejó claro ayer muy que vaya a subirse al mismo tren que Ramón. «No podemos estar de acuerdo en todo», comentó Riesco tras dejar bastante explícito que la «deferencia», encierra, para él, una clara estrategia política del presidente del Consejo para tratar de calmar con el Alvia la impaciencia social por la demora del trazado berciano del AVE. «El Alvia es la casi alta velocidad», defendió José Luis Ramón poco antes de las palabras de Riesco. En esta coyuntura de desconfianza, la incógnita se resolverá el próximo miércoles día 24 a las 11.42 en la estación de Ponferrada, que es cuando el presidente comarcal ha datado su doble invitación.