El AVE no cumple con el presupuesto y deja sin gastar la mitad de la inversión

Ical | Valladolid

Las infraestructuras vinculadas al AVE arrastran un déficit inversor, después de que en 2017 el anterior Gobierno no ejecutara prácticamente la mitad de los recursos previstos. En concreto, se quedaron en los cajones del departamento de Íñigo de la Serna casi la mitad de los fondos que había presupuestado para la construcción de la Variante de Pajares y las líneas de Alta Velocidad hacia Burgos y Galicia. El Ministerio ejecutó una inversión a través de la sociedad Adif Alta Velocidad de 230 millones, lo que supone un 52,9 por ciento del total consignado en el Presupuesto General del Estado para 2017 -436 millones-, un ejercicio en el que las cuentas sufrieron un retraso de siete meses en su entrada en vigor, por el bloqueo en la conformación del gobierno, que presidió Mariano Rajoy, que se mantuvo al frente del ejecutivo, pero en funciones. Todo ello dejó la ejecución de las inversiones reales del gestor ferroviario de Alta Velocidad bajo mínimos en la Comunidad. De hecho, cinco de cada diez euros no se gastaron pese a estar previsto, aunque en algunas actuaciones el Ministerio ha sufrido las consecuencias de las disputas abiertas con las adjudicatarias de las obras del AVE y otros problemas técnicos, como las filtraciones y derrumbes en la Variante de Pajares y el tramo entre Venta de Baños y Burgos.