Diario de León

El museo Vela Zanetti es invadido por `Doce monos´

Francisco Campos también prepara un gran mural para el Museo de la Catedral

Francisco Campos, con uno de sus singulares grabados.

Francisco Campos, con uno de sus singulares grabados.

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Marcelino Cuevas | León
León

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La obra de Francisco Campos está llena de ironía y contiene infinitos mensajes. En esta ocasión presenta en la galería de la Fundación Vela Zanetti Doce grabados, doce monos, en los que siempre aparecen tres personajes: un mono, una calavera y otro espectador asociado que se pierde en la escenografía de las imágenes.

El pintor, que lleva más de cuarenta de trayectoria artística, está preparando en la actualidad un gran mural para el Museo de la Catedral de León, un Descendimiento en el que desarrollará, como tantas otras veces en su carrera, una temática profundamente religiosa. Actualmente participa con su obra en la nueva edición de Las Edades del Hombre, que se está desarrollando en Medina de Rioseco y en Medina del Campo.

Los sugerentes grabados de Campos que pueden admirarse en el museo Vela Zanetti tienen varias lecturas: en una primera impresión «pueden parecer cargados de dramatismo —explica el autor—, pero en el fondo siempre hay un poso de ironía. De una forma u otra, todos tratan sobre la vida y ésta es demasiado importante para tomársela absoluta y únicamente en serio. A veces una mirada un tanto burlona es muy saludable». Los seres que pueblan los grabados del artista tienen siempre un acento tribal, primitivo, que de alguna manera pueden emparentar sus trabajos con los de los artistas primitivos y, especialmente, con la iconografía popular de México, donde tanta importancia tiene la representación de calaveras y esqueletos. «Mis calaveras están siempre sonrientes, son elementos que en ningún caso quieren añadir dramatismo a las escenas en las que los monos hacen de las suyas».

La serie comienza con el grabado titulado Monos malabares y termina con El último mono, «que es un autorretrato en clave de humor. Pero, ¿quién es el último mono?, ¿el que aparece en la imagen a mis pies, o yo mismo como individuo y como representante de la humanidad? Aquí queda un interesante espacio para la reflexión». En cuando las técnicas empleadas, explica el autor que ha habido muchas y muy variadas, desde las más clásicas al collage. «He empleado distintas técnicas de grabado calcográfico tradicional, mezclándolas como me ha parecido conveniente, aguafuerte de línea, punta seca, agua tinta al azúcar, a la sal o a la resina y barniz blando». En cada una de las obras se mezclan varias de estas técnicas y algunas, que son ejemplares únicos, están terminadas con lápices de colores y acuarela».

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