Atracón Sabina

BUEN AÑO televisivo para Joaquín Sabina, después de años de relativa sequía catódica, sobre todo en TVE por razones fáciles de adivinar (y lamentables, claro). Estuvo con Wyoming, después con Julia, el otro día en Buenafuente (aunque en Antena 3) y anteayer en La 2, con un especial a la espera de su álbum Alivio de luto. El personaje da juego y se merece los programas que se quiera. Tan buen poeta como compositor, su voz rota contribuye a transformarlo en icono canalla, como gusta reivindicarse. Habló desde su estudio en compañía de sus dos colaboradores musicales más directos. Se confesó otra vez, quizá diciendo poco nuevo. El programa incluyó el videoclip del primer sencillo, Pájaros de Portugal , obra de Víctor García León, prometedor realizador, hijo del cineasta José Luis García Sánchez y la cantante Rosa León. Pero como casi todo tiene un pero, se acrecienta la sensación de que en cuanto a actividad cultural y a sus agentes, las teles piensan en clave centralista. Existe Madrid y el resto es accesorio. Eso tan viejo de que si no frecuentas la Corte, lo tienes crudo. El mercado es así y qué le vamos a hacer, pero la primera televisión publica debiera ampliar el visor a la periferia. Sabina es grande. Su música la compramos y escucha mos muchos. Cierto. Pero hay otras culturas en el país, hay otros creadores. Que también les den cancha.