Diario de León

El profesor ha realizado una titánica labor de investigación, restauración y traducción

La RAE designa mejor libro del 2005 una obra del leonés González Cuenca

Ha revisado el «Cancionero General», cinco tomos de poemas de finales del siglo XV

León

Creado:

Actualizado:

?iez años de trabajo. Durante una década el catedrático leonés Joaquín González Cuenca ha puesto «en orden» el Cancionero General. La Real Academia Española (RAE) ha premiado su esfuerzo designando los cinco volúmenes que integran esta obra Mejor Libro del 2005. El Cancionero General es un referente indiscutible para estudiar la poesía castellana del Siglo de Oro, ya que en sus páginas aparecen las imágenes poéticas que emplearán escritores de la talla de San Juan de la Cruz. La pretensión de la nueva edición radica en la incorporación de un aparato crítico que aún no se había elaborado. Joaquín González Cuenca parte de una lectura integral de todas las versiones del Cancionero General , anotando las diferentes variantes que se realizan a lo largo del siglo XVI. El aparato crítico esencial consta de notas de urgencia, de marcado carácter filológico, ya que explican el sentido de las palabras que aparecen en los poemas, y de notas sobre el contenido histórico que contextualizan el significado de las expresiones. Las notas filológicas sirven para permitir una lectura coherente de los textos y las históricas permiten centrar el sentido de las composiciones. Cuenca, responsable de al edición publicada por Castalia en colaboración con la Generalitat Valenciana, ha hecho una titánica labor de actualización del Cancionero de Hernando del Castillo. Este librero de Segovia pasó veinte años recopilando los poemas que circulaban en España a finales del siglo XV, hasta que halló un empresario y un impresor dispuestos a invertir en la edición de una compilación de poemas y coplas no publicadas o poco difundidas. Los primeros ejemplares En 1511 ven la luz los primeros mil ejemplares del Cancionero General. En realidad es una antología construida sobre cancionerillos individuales y colectivos, pliegos sueltos, originales autógrafos y relatos orales, que se iban a convertir en el soporte libresco para la educación lírica y sentimental de varias generaciones. Un auténtico best seller que inspiraría a las grandes plumas del Siglo de Oro. Pero el libro, del que un siglo circulaban 9.000 ejemplares, no volverá a editarse hasta 1882. No es que los lectores le dieran la espalda, sino que la censura lo orilló por contener obras procaces, blasfemas y, en algunos casos, críticas con la nobleza. González Cuenca presenta ahora al lector tres ediciones diferentes: el texto en su estado tipográfico original, la restauración a la luz de la filología y una edición modernizada, de forma que el lector comprende fácilmente todo lo que expresa cada poema. Los cuatro primeros tomos están dedicados a los textos tanto de la primera edición impresa en Valencia como de las ocho que se realizaron en diferentes lugares a lo largo del siglo XVI, el quinto tomo recoge la Instrumenta: tablas, glosario, índices e ilustraciones que la completan y enriquecen.

tracking