Primer triunfo del año en León

Cultural 3 Izarra 1 La Cultural gana en el Reino por primera vez en lo que va de año tras no hacerlo desde el día 13 de diciembre del año pasado. Remonta al Izarra en la segunda parte

ÁNGEL FRAGUAS | LEÓN

El 13 de diciembre del año pasado era la fecha de la última victoria lograda por la Cultural en el Reino de León. Ante el filial del Sporting de Gijón (1-0). El equipo de Juan Ferrando ha necesitado una vuelta entera para volver a ganar en casa. El domingo se mide al Sporting B, pero en Mareo. Después de la ansiedad y el agobio de la primera parte, tras el gol del visitante Yoel, el conjunto leonés remontó el marcador adverso para imponerse por 3-1. Cuatro meses largos para que regresara el triunfo al Reino. Demasiado tiempo. Aunque todavía con tres jornadas por delante para asegurar la quinta plaza de la clasificación. Un objetivo menor por el que luchar cuando se tocó el play off. Una fase de ascenso, que por mucho que se tilde de imposible en algunos foros, se pudo haber peleado hasta la última jornada de Liga de no haber sido por el pobre comportamiento del equipo leonés en el Reino de León.

La Cultural volvió a casa con cuentas pendientes. El equipo leonés así lo entendió. Se fue a por la victoria desde el primer minuto para alegrar la tarde a una sufrida afición, que siempre quiere lo mejor para el equipo, aunque no todos lo entiendan y se dejen llevar por sus egos personales. El triunfo de la Cultural tenía que actuar como mejor bálsamo para limar asperezas. La comunión entre la grada y el campo debe ser el punto de referencia para un club que quiere crecer. Y mientras en el Reino de León se resista esa simbiosis, los logros deportivos tendrán que esperar.

El Izarra supo sacar jugo a la ansiedad de los de Ferrando en los primeros compases del encuentro. No se puede marcar el segundo gol antes de haber sellado el primero. Y la Cultural quiso hacer malabares nada más saltar al campo. Algunos futbolistas rompieron la dinámica por los que debía transitar el partido. Acciones entre el centro del campo y la parte de arriba demasiado aceleradas. Sin pausa. Sin orden. Muy pronto llegó el apretón para los de casa. Yoel puso por encima al Izarra en su primera llegada a la portería de Jorge Palatsí. Tocaba remontar.

Los de casa se sintieron en los minutos siguientes al gol visitantes aturdidos por el golpe recibido. Ahí fue cuando la contundencia, la seguridad y el saber leer el partido desde atrás por Míchel Zabaco, la Cultural comenzara a trenzar juego. Las líneas se juntaron para llegar arriba. El trabajo de Nacho Matador y Gonzalo en la línea ancha, además del jugón Cristóbal, que dio un recital en lugar de disputar un partido de fútbol, resultaron determinantes.

Aketxe, por su parte, se olvidó por momentos de circunstancias ajenas que tiene y debe asimilar como jugador de fútbol que es, para provocar un penalti de libro que posteriormente adivinó el portero visitante Aitor Navarro para rechazar su disparo desde los once metros. La fuerza de Aketxe está en el campo. No fuera de él. Ha cometido errores. Y lo sabe. Centrado será el buque insignia de la Cultural durante muchos años. No se debe hacer caso de los que le utilizan como arma arrojadiza contra un sector de la afición que le sigue idolatrando, pese a que los que se creen culturalistas de boquilla le hayan hecho pensar lo contrario. Se quiere que eche sapos y culebras por su boca, según el que le susurra al oído, que le hace creer que el resto son enemigos de la Cultural. Así va mal encaminado. Seguirá el itinerario de los torpes. Gestos como el de ayer le pierden como futbolista. Y así se lo debe hacer ver el club. La afición a la que atacó ayer con sus dedos índices tapándose los oídos le considera el mejor futbolista de la Cultural. Y el periodista de la Cope, Carlos García, se merece el máximo respeto de un jugador que ha hecho bastante menos por el club que el informador. Sí mucho menos. Creo que no haya que entrar en detalles.

Una victoria en todo el año 2016. O mejor dicho, un triunfo en una vuelta completa del campeonato de Liga en casa no es para sacar pecho. El fútbol, como todo en la vida, es de los humildes. De los que saben diferenciar el campo de la tribu.

Y es que en la Cultural todo se magnifica. Es un club de Segunda B. La tercera categoría del fútbol español. Mientras la humildad y los pequeños detalles no se instauren de una vez, el club seguirá caminando en la mediocridad que anhelan los mediocres.