Brillan sol y luche como en Corpus

A. barreñada | Quintana

Segundo corro de la Liga de Verano en lucha sénior masculina disputado en Quintana de Rueda, de seis a nueve menos cuarto de la tarde del domingo. Arbitraban Roberto Andrés Moro y Juan Pablo Tejerina los combates de cuarenta y nueve inscritos. Creció la «nómina» y lo hizo más que bien: se disfrutó. Cuidado el terreno, tarde agradable (incluso calurosa) y buena luche, incluyéndose la disputa del Trofeo de «La Cazadora» de Riol peleteros y sumándose alguna sorpresa en resultados.

No lo fue, no sorprendió, la nueva victoria de Ibán Sánchez en ligeros, ni lo fue, ni sorprendió, la buena lucha de Mario del Blanco, el de Taranilla, que le volvía disputar final al de Barrillos, tras previos combates llenos de buena maña. Entre ellos, el que le ganaba a Guillermo Gonzáklez «Busy», con el joven luchador del alto Curueño sacando a su rival a lo alto, donde éste se sabía de tierra de los mejores «gatos»: posarle y caer ante él. Otro de los de menos edad y sin complejos, el ribereño Javi Sancho, le hizo en siguiente ronda otro gran combate; logró el de Represa anotar entera, pero resolvió Mario con dos de las suyas. Y quizás el mejor de todos esos buenos enfrentamientos era el librado con David Acevedo en la segunda semifinal, donde Filín buscó con insistencia, también sacando en alto, y logró recompensa de entera tras media de Mario. Pero luego, se revolvía de manera ágil y vistosa el de Taranilla para hacer suya la siguiente caída, ya definitiva. En el camino, el de Felechas dejaba (¡otra vez!) parte de una muela.

Javier Oblanca le ganó a Filín el tercer puesto con efectividad, la final para Ibán con manifiesta solvencia: dos enteras a cero.

Víctor Llamazares en primer combate de medios, superando a Samuel Sánchez por media caída. El montañés de Valderrueda iba a luchar con mucha cabeza, sin excesos, centrándose en lo necesario. Tras él se clasificaba para segunda ronda un ribereño de Marne que no sabe (o no quiere) medirse con límites: «Gasi».

Le hizo sudar y entregarse el joven Unai del Campo, que anotaba media inicial y entera más.

Bueno de nuevo (en uno de sus mejores momentos, se insiste...) Diego Arce, y bueno (sin que él quiera admitirlo) Eduardo Díez, el de Barrillos. A Edu le ganó primera semifinal Víctor, Gasi la segunda a Arce, regalando dos saques con cruce que aplaudía con ganas la grada.

No descansaba Diego para luchar el tercero, y lo ganaba. Tras señalársele pasividad a los dos finalistas, Víctor Llamazares daba lista entera y sumaba dos medias por sueltas de Adrián García, anotando segundo corro por segunda victoria.

Eran los menos los de semipesados, no los de menor interés. Tomás González ganaba el primer enfrentamiento a Roberto Gutiérrez «Guti el Bueno» de Prioro. El de La Vecilla iba a llegar hasta la final (donde tampoco sería sorpresa el vencedor), y algo más allá.

Se incorporaban a Liga en pesados Abel I. Cabero y su compañero Alberto Bahíllo. El de Escalada eliminó al de Valdearcos. A su vez, a Bahíllo lo dejaba en cuartos «Guille» el de Valdeón con una entera. Por su lado, exento de primera vuelta, había llegado Eduardo Díez, el de Pallide. «El Oso» dio primera caída a Alejandro Fernández (del Condado), que hubo de retirase con posible lesión de clavícula. después le ganaba semifinal a Bulnes con dos enteras limpias y con otras dos la final y el corro a Guille.