Toni Kroos sale al rescate del Real Madrid
Un disparo del alemán repleto de calidad de diestra desde la frontal a nueve minutos del final da el triunfo al equipo merengue
Toni Kroos y Lucas Vázquez celebran el segundo gol del equipo blanco, obra del alemán. KIKO HUESCA
IGNACIO TYLKO | MADRID
Con sufrimiento, polémica, ya que el gol de Alvaro Morata estuvo precedido de fuera de juego, y un disparo extraordinario del alemán Toni Kroos, flojo hasta entonces pero determinante a la postre, el Real Madrid solventó un duelo complicado que le sitúa con seis puntos tras dos jornadas victoriosas (2-1).
Pese al 7-1 del curso pasado, con cuatro goles de Cristiano Ronaldo, no es precisamente el Celta del Toto Berizzo un rival cómodo para los grandes. Su osadía, esa propuesta innegociable de tocar y de mover el balón de lado a lado hasta encontrar algún espacio para percutir, no suele caracterizar a los equipos que visitan el Santiago Bernabéu. Pese a la depresión causada por la marcha de Nolito al City de Guardiola y a la sorprendente suplencia de Iago Aspas, este ‘Eurocelta’ tiene calidad y exige un mayor sacrificio defensivo de jugadores, tipo Kroos, más acostumbrados a tocar y a que sus rivales les persigan. Y si a eso se le añaden ausencias tan sonadas como la de Cristiano Ronaldo y el intenso calor de esta tarde-noche de agosto en Madrid, se entiende que los blancos no se sintieran cómodos.
Faltó algo de ritmo, quizá por estar empezando la campaña y seguro por esa sauna en la que se convirtió el feudo merengue, pero el choque fue vistoso. Sin un dominador claro, sin una gran presión en el centro del campo, y con dos conjuntos que nunca especularon. La gran diferencia, relacionada con los presupuestos, fue el poderío de los equipos en ambas áreas y la determinación de los blancos para presionar cuando el portero Sergio Alvarez la jugaba.
En el primer acto, los locales sólo inquietaron con tiros lejanos de Luka Modric, el mejor del partido porque quitaba, desbordaba y no se lo pensaba al lanzar. Obligó a lucirse a Sergio y en otro disparo lejano, pero enorme, estrelló el balón en el travesaño. Se esperaba algo más de continuidad del mallorquín Marco Asensio, el jugador de moda por su gran pretemporada, su desparpajo, su golazo en San Sebastián y su convocatoria para la selección española, y más remate de Gareth Bale, autor de un doblete en Anoeta. Alvaro Morata, en cambio, se movió bien y siempre generó inquietud. Los goles llegaron en la segunda parte. Morata adelantó al Madrid. Orellana empató. Y Kroos puso la sentencia.