Los Hispanos repiten triunfo

Segundo encuentro de Gonzalo Pérez con los Hispanos —35-31— y de nuevo una gran actuación del extremo leonés del Abanca Ademar. Mismo rival, Rumanía, y mismo escenario en Avilés para un encuentro donde el canterano ademarista salió en el siete inicial anotando cinco goles.

El combinado español salió decidido en busca de la victoria desde los instantes iniciales, sin dejar resquicios para que los rumanos albergaran esperanzas, y les pudieran en situación comprometida como hicieron el pasado jueves en el primero de los dos encuentros amistosos entre ambos. En esta ocasión el conjunto que dirige Jordi Ribera se mostró contundente y sin fisuras con una defensa 6-0, muy atento en las anticipaciones para encarrillar el partido, en el que consiguió que el rival nunca se colocara con ventaja.

El primer tiempo arrancó con un gol de Marchán, con el que los Hispanos encauzaron el triunfo. Después de que los rumanos les igualaran a un tanto, llegó el gol de Imanol Garciandia, incorporado a la convocatoria por lesión de un compañero (2-1), y a continuación comenzó anotador del extremo del extremo Ángel Fernández, que hizo el 3-1, con el que los españoles sellaron su despegue.

Fueron ya inalcanzables los Hispanos, que iban endosando goles en la portería del conjunto que dirige el exentrenador del Barcelona Xavi Pascual, que no se rendía y peleaba cada jugada hasta alcanzar un inquietante 9-8, al que respondió España con una reacción ofensiva que le llevó al mejor parcial de la primera media hora para marcar un 16-8, la mayor ventaja hasta entonces, que le permitía doblar al rival. El acierto ofensivo y la seguridad defensiva, especialmente en la portería con un entonado Sergey Hernández, llevó a los vigentes campeones continentales a terminar con un marcador rotundo (20-13).

Tras el descanso, se mantuvo la tónica de superioridad local, a la que se sumó el meta Rodrigo Corrales, con acertadas intervenciones en su entrada en la cancha en sustitución del portero español que milita en el Benfica. Aprovechó la selección española para incrementar su ventaja, que Xavi Pascual cortó pidiendo un tiempo muerto que optimizaron los rumanos, pasando de un marcador de 25-14 a 29-23.

Los de Jordi Ribera, en su preparación del equipo que tendrá que acometer el nuevo ciclo olímpico, cambió a una defensa 5-1, y buscó cómo contrarrestrar a una selección rumana que empezaba a reivindicarse hasta tal punto que el seleccionador español tuvo que frenar la remontada del oponente, con un tiempo muerto en el minuto 21 después de que los visitantes se acercaran a 5 goles (30-25).

Insistía el equipo de Pascual cuando Ferrán Solé hizo el segundo de los dos goles consecutivos con los que España selló la diferencia que le daba la tranquilidad definitiva con un marcador de 34-27, que le permitió disputar los cinco minutos finales sin agobios.