Silvano piensa en Álvarez Tomé

Miguel Ángel Álvarez Tomé está próximo a convertirse en el entrenador de la Ponferradina para la próxima temporada. Esta afirmación ya se ha escuchado en las últimas fechas, sólo que cambiando el nombre el protagonista, y al final quedó en nada. Sin embargo, ahora las negociaciones que se están llevando a cabo entre el técnico y el club blanquiazul podrían prosperar ya que Tomé sí que parece «interpretar» correctamente el mensaje de Silvano, cosa que no ocurrió con otros entrenadores que ya son historia para la Deportiva, a juicio del máximo mandatario berciano. El caso es que después de «fracasar» en los intentos de incorporación de Jesús Mari Gómez Fuertes y, más recientemente, Antonio Gómez, el presidente de la Ponferradina ha puesto sus ojos en Miguel Ángel Álvarez Tomé. A Silvano no parece importarle en absoluto que el todavía entrenador de la Cultural haya fracasado esta temporada en su intento de subir a los blancos a Segunda División «eso es una historia completamente distinta y no puede influir, en absoluto, en el desenlace de las negociaciones que estamos manteniendo». Por esa razón, Silvano y Tomé se vieron las caras este fin de semana, fuera de León y también de Ponferrada, pese a lo cual, hubo una filtración que parece emanar desde el interior del propio club culturalista, mediante la cual todo el asunto ha visto la luz antes de que los protagonistas lo hubieran deseado. El encuentro fue satisfactorio porque, eso es seguro, a Silvano le gusta Tomé y el técnico tiene en gran estima al presidente ponferradino. Eso está bien para empezar, pero en una negociación influyen otros factores. Y hasta en eso parece que ambos se entienden a la perfección. Silvano le ha hecho ver a Tomé que este año la cosa va en serio y que se necesitan resultados. El técnico recoge el guante y se muestra dispuesto a abordar empresas importantes «en un club al que me gustaría entrenar, por muchas razones». Pero el punto crítico de la operación podría residir en lo económico. Tomé tenía un contrato suculento en el Amilivia y ahora se le exige «apretarse el cinturón» de entrada, para resarcirse luego si las cosas van por el buen camino. En realidad es la misma historia que se les planteaba a Fuertes y Gómez, sólo que esta vez parece que Tomé se muestra más «receptivo» que los anteriores «no me asusta el riesgo en absoluto y yo creo que por ahí no vamos a encontrar ninguna complicación». Como consecuencia de todo lo anterior, tanto Silvano como Tomé están dispuestos a retomar esta misma semana el encuentro que iniciaran días atrás. La Ponferradina quiere cerrar la contratación de un entrenador ya mismo porque la plantilla está también a la espera de acontecimientos para poder irse de vacaciones. Todo debe hacerse sin prisa pero sin pausa, porque Silvano insiste en que «es mucho lo que está en juego y hay que meditarlo bien».