El Alcalá llegó a Ponferrada con toda la plantilla, incluyendo a los dos sancionados

La Real Sociedad Deportiva Alcalá llegó a Ponferrada al filo de las nueve de la tarde y lo hizo con toda la plantilla al completo, incluyendo a los jugadores lesionados y también los dos hombres que están sancionados tras el partido de ida, que son Gonzalo y Santi López. Los madrileños quedaron concentrados en el Hotel Temple, lugar en el que aguardarán hasta dos horas antes del encuentro de esta tarde, cuando inicien el traslado al Toralín. Según indicó ayer el gerente de la entidad rojilla, Visnjic no tenía intención de someter a sus jugadores a ninguna sesión de entrenamiento en tierras bercianas, puesto que habían estado trabajando en Alcalá hasta la una de la tarde de ayer. Demasiado trajín en la zona A diferencia de los gustos de Tomé, que suele optar por elegir hoteles distantes de las localidades donde tiene que jugar su equipo, el Alcalá ha elegido un establecimiento como el Temple, situado en pleno casco urbano ponferradino y además en una zona que suele registrar bastante movimiento en la noche de los sábados. Ya lo detectaba ayer el gerente alcalaíno que respondía a la pregunta de por qué no se había elegido un lugar de concentración más alejado del centro de la ciudad, afirmando que «quizá si hubiéramos conseguido otro resultado en el partido de ida, a lo mejor se hubiera buscado otro emplazamiento fuera de Ponferrada, pero con ese marcador hemos pensado que lo mejor sería estar aquí cerca del estadio, si bien es verdad que hay mucho movimiento en la zona».