La izquierda francesa espera ganar más regiones que el Frente Nacional
Hollande y Vallsconfían en el apoyo de ecologistas y comunistas en la segunda vuelta.
El presidente francés, François Hollande.
La izquierda francesa, liderada por el presidente socialista François Hollande, confía en superar el próximo domingo en número de regiones conquistadas al ultraderechista Frente Nacional (FN), claro ganador de la primera vuelta de las elecciones regionales. La esperanza rosa se fundamenta en que el bloque de fuerzas progresistas, que concurrieron por separado, totalizó el 34,44% de los votos frente al 28,42% reunido por la formación de extrema derecha, su mejor resultado histórico y nuevo techo electoral.
Los socialistas, que cosecharon con sus siglas el 23,48% de las papeletas, esperan contar en la segunda cita con las urnas con la aportación de los electores ecologistas (6,81%) y comunistas (4,15%). Si esos trasvases de votos son matemáticamente significativos, creen que podrán conseguir entre cuatro y siete regiones de las trece en liza, sin contar los cuatro territorios en otros continentes (Martinica, Guadalupe, Guyana y Reunión). «Nada está perdido», dicen los estrategas de la formación gobernante en el poder central, calculadora en mano.
Las cuentas
Según sus cálculos, tres regiones están al alcance de la mano (Aquitania-Lemusín-Poitou-Charentes, Bretaña y Lengua de Oc-Rosellón-Mediodía-Pirineos), cuatro pueden caer en su saco (Isla de Francia con capital en París, Córcega, Normandía y Centro-Valle del Loira) y otras tres se presentan muy reñidas (Auvernia-Ródano-Alpes, Borgoña-Franco Condado y Países del Loira) al margen de conservar las ultramarinas Guadalupe y Martinica.
Ya han dado por perdidas tres regiones en las que pasaron el corte en tercer lugar: Provenza-Alpes-Costa Azul, Norte-Paso de Calais-Picardía y Alsacia-Champaña-Ardenas-Lorena. En las dos primeras han retirado sus listas en cumplimiento de la consigna impartida por la dirección nacional para entorpecer los probables triunfos de la ultraderecha. Pero en la tercera el candidato socialista, Jean-Pierre Masseret, anunció que se mantendrá en la segunda vuelta aunque favorezca la victoria de Florian Philipot, número dos e ideólogo del soberanismo eurófobo del FN.
La retirada de listas responde a la negativa del líder conservador Nicolas Sarkozy a sellar pactos o fusiones en las regiones a tiro del partido de Marine Le Pen. «Es una gran falta moral que dejará huellas», dictaminó el primer ministro, Manuel Valls. El secretario general del PS, Jean-Christophe Cambadélis, juzgó que «la Historia será severa con quienes dicen ‘mejor la extrema derecha que la izquierda’»