Diario de León

El secretario de Estado de EE.?UU. habló con Sharon y Mazen para que retomen las negociaciones

Powell convoca al Cuarteto de Madrid en Jordania para salvar la Hoja de Ruta

La Casa Blanca ha enviado una delegación de 16 personas para preparar el terreno

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Joaquín Rodríguez - nueva york
León

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Con la reciente escalada de violencia en Israel, el Gobierno de George W. Bush está tratando a toda costa de que no se haga añicos la llamada Hoja de ruta, el plan de paz en Oriente Próximo. Para conseguirlo, está mandando la artillería diplomática pesada a la región: la semana que viene el secretario de Estado, Colin Powell, viajará a la zona para tratar de arrancar concesiones a israelíes y palestinos. Powell habló el jueves por teléfono con el primer ministro israelí Ariel Sharón y su homólogo palestino, Abú Mazen, para persuadirles de volver a sentarse a negociar a pesar de la reciente oleada de atentados. El secretario de Estado tenía previsto viajar a Jordania la semana que viene para una reunión económica, pero ahora el trayecto ha sido modificado para incluir las visitas a israelíes y palestinos y darles prioridad absoluta. Mientras se encuentre en Jordania, Powell se reunirá con enviados de la Unión Europea, las Naciones Unidas y Rusia , los responsables junto con EE?.UU. (Cuarteto de Madrid) de la elaboración de la Hoja de ruta. Un encuentro que tendrá lugar el día 22 en Aqaba. En Washington los ánimos están bajos. Muchos funcionarios creen que será difícil lograr recuperar el plan de paz con lo sucedido en esta semana. Por eso la Casa Blanca calcula que una intervención de un funcionario del nivel de Powell podría ayudar a que las cosas regresen a su sitio. Así, para preparar la visita de Powell, un experto en Oriente Próximo del Departamento de Estado, David Satterfield, se reunió ayer en París con otros enviados de Europa, Rusia y Naciones Unidas. Trabajo de campo Por otro lado, el enviado de Estados Unidos para Asuntos de Oriente Próximo, John Wolf, aterrizó ayer en Israel junto con un equipo de 15 asesores para seguir presionando en la puesta en práctica de la Hoja de ruta, mediante la persuasión de que cada una de las partes dé pasos pequeños pero concretos para recuperar la confianza. Después del atentado del miércoles en Jerusalén que mató a 16 personas e hirió a otras 100, Israel ha suspendido su decisión de liberar prisioneros palestinos y desmantelar algunos de los asentamientos. Pero los funcionarios estadounidenses tendrán que convencer a los israelíes de que esos pasos son necesarios para garantizar la paz a largo plazo. Además, tras de las críticas de Bush a Israel a principios de la semana, la Casa Blanca y el Departamento de Estado están empeñados en que ambas partes contengan sus ánimos de venganza y se sienten a negociar. ¿Lo lograrán? Difícil saberlo. Por ahora, lo único que queda claro es que la Administración Bush ha caído en la trampa que pretendía evitar con la elaboración de la 'Hoja de ruta': estar en medio del conflicto. Sólo una presencia constante en la región de los funcionarios estadounidenses logra evitar que se desaten las tensiones entre israelíes y palestinos, por lo que Powell y demás altos funcionarios estarán condenados a pasarse una gran parte de su tiempo en la región.

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