Francia avisa a Londres que debe defender los intereses comunitarios Blair convoca una cumbre en otoño sobre el futuro de la Unión

El primer ministro británico, Tony Blair, que asumió ayer la presidencia semestral de la Unión Europea, deberá trabajar para «el conjunto de los europeos» y ya no sólo pensar en sus intereses nacionales, declaró ayer la responsable francesa de Asuntos Europeos, Catherine Colonna. Si Blair quiere «realmente» una Europa «eficaz y política» y no un mero «gran mercado», y se emplea en resolver los problemas de presupuestario y otros, «Francia le ayudará», pero, de lo contrario, «lo diremos», dijo la ministra delegada gala al desear «buena suerte» a Londres .Al mismo tiempo, la responsable francesa hizo una cerrada defensa de la Política Agrícola Común (PAC), cuyos fondos Londres quiere recortar, y reclamó la «reforma del cheque británico» (devolución anual al Reino Unido, desde 1984 de parte de su contribución al presupuesto comunitario). «Lo único que no ha sido reformado es el cheque británico», dijo Colonna, en la emisora France Inter desde Budapest, donde efectuó ayer su primera visita desde que asumió el cargo hace apenas un mes. El cheque británico «ya no tiene ninguna justificación» y su reforma es «necesaria», si se quiere que «cada país contribuya equitativamente a la financiación de la Unión ampliada», afirmó. Insistió en que «éste es el problema», y no la PAC, que ya fue reformada en 2003 y cuyo presupuesto hasta 2013 fue objeto de un acuerdo en 2002. Francia y otros países de la UE han responsabilizado a Blair por el fracaso sobre el presupuesto comunitario para 2007-2013 en la cumbre de Bruselas de mediados de junio. Aislado en la cuestión del «cheque británico», Blair contraatacó condicionando toda revisión del mismo a una reducción de la PAC (de la que los agricultores franceses son los primeros beneficiarios) y a una reforma en general del presupuesto comunitario para orientarlo hacia gastos de «futuro», como la investigación e innovación. «Hasta ahora, el Reino Unido no ha demostrado que esté dispuesto a contribuir a la financiación de la Unión ampliada» y en particular «a los menos ricos de los europeos», afirmó la ministra delegada francesa. Agregó que si el jefe del Gobierno británico quiere hacerlo, «tanto mejor», pero «esperamos la prueba, que hasta ahora no se ha manifestado». En la cumbre de Bruselas, Blair rechazó incluso la propuesta de la entonces presidencia luxemburguesa de la UE que le eximía de contribuir a los gastos de la ampliación que rechaza, es decir, las ayudas agrícolas directas, para limitarse a financiar lo que le gusta (innovación, entre otras), según fuentes diplomáticas. El ya ex presidente de turno de la UE, Jean-Claude Juncker, advirtió ayer a los británicos de que «no podrán ir mucho más lejos» en el ahorro agrícola. Tony Blair lanzó ayer un mensaje de tranquilidad a sus socios europeos en su primer discurso tras asumir el Reino Unido la presidencia de la UE y anunció la convocatoria en otoño de una cumbre informal de jefes de Estado y de Gobierno para debatir el futuro modelo social europeo. Blair recibió ayer en Londres a José Manuel Durão Barroso, y todo su equipo de la Comisión Europea, encuentro que marca habitualmente el inicio de las presidencias de la UE. El primer ministro aseguró con escasa convicción que intentará alcanzar un acuerdo sobre el presupuesto comunitario durante los seis meses de presidencia, aunque no pudo garantizar que así ocurra. «Que sea posible o no, no lo sé», indicó durante la rueda de prensa conjunta con Durão Barroso. Añadió que «no hay motivo para pretender ocultar que existen asuntos importantes y verdaderas dificultades», y agregó que si se alcanzan resoluciones, no se verán, es decir, no saldrán a la opinión pública, al menos hasta diciembre, cuando finaliza la presidencia. Barroso explicó que «la prioridad es la renovación y la reforma económica de la Unión Europea, ya que es indispensable para preservar nuestro esti-lo de vida». También dijo que los líderes europeos deberían de demostrar «una cultura de compromiso», frente a la sensa-ción de tratar las negociaciones como combates de boxeo. «So-mos una unión de 25, muy pron-to 27, algo muy diverso y nadie va a imponer su punto de vista a los demás». Por ello, pidió a los estados miembros que eviten la «retórica nacionalista». Cumbre de otoño Con respecto a la reunión informal, Blair no aclaró si será una reunión adicional o sustituirá al tradicional Consejo Europeo de otoño. Sobre los temas a tratar indicó que se discutirá «la viabilidad del modelo social de Europa a la luz de los cambios que se están produciendo». Para Blair alcanzar una resolución «es esencial para definir la futura dirección de Europa». Sin embargo su buenos propósitos no parecen haber convencido en Europa. El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que su Gobierno mantendrá un actitud «de colaboración y constructiva» con Londres, pero advirtió que en las negociaciones presupuestarias España seguirá reclamando un «presupuesto suficiente, ya que no queremos menos Europa». El primer ministro luxemburgués, Jean Claude Juncker, fue más duro con Londres. «No creo que los británicos puedan ir mucho más lejos» en relación a las concesiones en las negociaciones presupuestarias. Por su parte Francia, la responsable de Asuntos Europeos, Catherine Colonna, indicó que Blair tendrá que trabajar «para el conjunto de los europeos y no sólo pensar en sus intereses nacionales». Las condiciones de Blair El Gobierno británico ya ha anunciado que condicionará cualquier acuerdo sobre el presupuesto de la Unión Europea para el 2007-2013 a una reforma en profundidad de la Política Agrícola Común, la cual absorbe el cuarenta por ciento del presupuesto comunitario, pese a que ese sector sólo representa a un cinco por ciento de la población europea. «Los Estados deben superar la retórica nacionalista y demostrar una cultura de compromiso» DURAO BARROSO Presidente de la Comisión