La Fiscalía italiana detiene a 32 miembros de la mafia calabresa

El fiscal nacional antimafia, Pietro Grasso, explicó ayer que la detención de 32 presuntos miembros de los dos clanes de la Ndrangheta, mafia calabresa, enfrentados desde hace años, ha evitado nuevos ajustes de cuentas tras el séxtuple asesinato de Duisburgo. «La operación de hoy es una primera respuesta en materia de prevención ante nuevos actos de violencia en la guerra entre las dos familias», señaló Grasso. La policía explicó en un comunicado que se han emitido más de 40 ordenes de busca y captura, tanto en el pueblo de San Luca como en otras ciudades italianas, y por el momento se han arrestado a 32 personas bajo la acusación de asociación mafiosa, homicidio y tráfico de armas. Según la nota, los cargos se refieren a homicidios relativos a la guerra mafiosa que mantienen desde hace años los dos clanes de la Ndrangheta, pero anteriores al séxtuple asesinato de Duisburgo, considerado un nuevo ajuste de cuentas entre los Vottari-Pelle-Romeo y los Nirta-Strangio. Las detenciones responden a las investigaciones por el asesinato el pasado diciembre de Maria Strangio, mujer de Giovanni Nirta, y entre ellos no están los sicarios de la matanza del pasado 15 de agosto en la ciudad alemana de Duisburgo. Por el momento, la policía ha confirmado la detención de los hermanos de dos de los asesinados en la citada ciudad, Achille Marmo y Giovanni Strangio, y de Giovanni Nirta, considerado el jefe de una de las «familias». Cooperación con Alemania El ministro del Interior, Giuliano Amato, señaló en un comunicado que la operación «ha sido una respuesta fuerte y necesaria para acabar con la guerra entre estos dos clanes de la Ndrangheta, que tanto terror han provocado». Amato añadió que estas detenciones pueden ayudar a las investigaciones de la policía de Alemana e Italia para «entregar a la justicia a los responsables y ejecutores de la masacre de Duisburgo». Durante la operación, en la que han participado 500 agentes de la Policia y Carabineros y varios helicópteros, ha sido completamente rodeado el pueblo de San Luca, escenario desde hace años de la guerra intestina mafiosa, para impedir huidas. Justo ayer, una delegación alemana, encabezada por el jefe de la Oficina Federal de Criminalidad, Jorg Zierke, viajó a Calabria para intercambiar información sobre los asesinatos con los investigadores italianos que han seguido el caso. Golpe a la mafia napolitana Por otro lado, la policía italiana arrestó ayer a Salvatore Lo Russo, de 54 años, presunto jefe de un clan de la Camorra, mafia napolitana, que lleva su nombre, y a su brazo derecho, Raffaele Perfetto, de 36 años. Fuentes policiales indicaron que los dos presuntos camorristas, buscados desde hace años por la Justicia, fueron detenidos en una casa de la localidad de Capodimonte, en la provincia de Nápoles. Según los expertos, Lo Russo es el jefe de un clan, conocido también como Capitoni, que se formó en la década de los años setenta y que controla una buena parte del tráfico de droga en los barrios napolitanosa, al sur de Italia.