El rastro vuelve a Clarés a la espera de su nueva ubicación
Vendedores del rastro de León, ayer, en su retorno a Clarés.
El rastro de León volvió a celebrarse ayer en la antigua explanada de Clarés, junto al campo de fútbol, a la espera de que antes de tres meses el alcalde anuncie su nueva ubicación.
Durante las dos últimas semanas, este popular mercado de los domingos por la mañana se ha suspendido debido a la celebración de las fiestas patronales de San Juan y San Pedro. En la zona donde se ubica desde hace un par de años ha estado instalado el recinto ferial.
Justo en el mes de julio de 2009, el entonces equipo de gobierno del Ayuntamiento de León decidió trasladar su celebración dominical desde Papalaguinda a Clarés alegando el inicio de las obras en este céntrico paseo y después de numerosas críticas del comercio de la ciudad por competencia desleal.
Ya en campaña electoral, el ahora alcalde, Emilio Gutiérrez, señaló que era necesario cambiar su ubicación para evitar que se convierta en un gueto. El lugar al que va a ser trasladado, según fuentes municipales, es una decisión ya tomada que se anunciará en las próximas semanas.
En el rastro participan todos los domingos casi 400 vendedores ambulantes.