La ULE estudia cómo asumir 60 becas de los que no pueden pagar la matrícula
Si no lo consigue, los alumnos perderán las materias aprobadas durante el curso.
«Hay casos que son sangrantes y debemos ayudar a estos alumnos a estudiar». Con estas palabras se refirió el rector de la ULE, José Ángel Hermida, a la situación en la que se encuentran en torno a 60 estudiantes leoneses a los que ni la Junta ni el Ministerio de Educación han concedido becas, pese a cumplir todos los requisitos porque no ha llegado el dinero.
Las situaciones derivadas de esta circunstancia recaen directamente sobre la ULE, pese a que quien estableció los nuevos criterios para conceder las becas fue el Ministerio. «El resultado lo conocíamos casi todos», dijo el rector que, además, dejó claro que apenas hay margen de maniobra ni para los estudiantes ni para la ULE. Para los primeros, porque el curso está a punto de terminar y, en plenos exámenes, muchos alumnos se han enterado de que no se les ha concedido la beca para pagar la matrícula. Esto quiere decir que tendrán que ingresar la cantidad correspondiente a los estudios que han realizado este curso. En caso contrario, la ULE anulará la matrícula y para nada servirá el esfuerzo realizado durante un curso completo. De momento, el rector ha dado la orden de que no se desmatricule a ningún alumno hasta el mes de septiembre.
Una coyuntura en la que se encuentran más de medio centenar de estudiantes leoneses y para los que la ULE está buscando una solución. Así lo explicó ayer el rector en el transcurso de la reunión mensual del Consejo de Gobierno. «Nos están llegando cartas de alumnos con situaciones personales muy difíciles, tanto que no pueden hacer frente al pago de la matrícula», explicó Hermida que añadió que se trata de jóvenes que, en algunos casos, tienen un buen expediente. Por eso, Hermida adelantó que está buscando «un agente externo» que financie algunas becas para que «podamos llegar, de forma excepcional, a dónde no lo han hecho las instituciones». Además, Hermida dejó claro que la ley impide eximir a ningún alumno del pago de la matrícula salvo que esté regulado por las becas.
No quiso adelantar el nombre de la entidad con la que mantiene negociaciones aunque sí matizó que, en este caso, «no es cuestión de grandes cantidades de dinero sino de sensibilidad social». Hizo hincapié en el «peligroso» círculo que entraña la pobreza. «Si un estudiante con buenas notas tiene que trabajar para pagarse los estudios rendirá menos y esto se traducirá en un peor expediente, en frustración o en abandono», alertó el rector. Una situación mucho más complicada aún teniendo en cuenta que la Junta ha dado a conocer la resolución de las becas en el mes de junio, cuando los alumnos se encuentran en pleno periodo de exámenes. «No ayuda a los alumnos a ir con la tranquilidad que deben a examinarse», indicó.
Hermida recordó que ya advirtió públicamente que «este tipo de decisiones generarían problemas a las universidades y así ha sido porque ahora somos nosotros quienes tenemos que ayudar a los alumnos que, por otro lado, son los que nos sostienen». No dudó en afirmar que «por una decisión de otros ahora es la ULE la que tiene el problema».
Para el rector de la ULE las becas «causan discriminación», más aún con las perspectivas que tiene el Ministerio de Educación de cambiar los requisitos académicos para poder acceder a estas ayudas el próximo curso, cuya nota podría llegar al 6,5. «No parece lo más adecuado ahora», auguró Hermida.
Al margen de las consecuencias económicas y académicas, la ULE se enfrenta también a otro problema y es que ha computado como ingresos las tasas de los alumnos que solicitaron beca. Si hay alumnos que no pueden ingresar la matrícula descompensará un presupuesto ajustado de por obligación. «Es sido un cúmulo de improvisaciones que no nos deja ningún margen de maniobra y que perjudica mucho a la gestión de la ULE», concluyó.