Diario de León

Exteriores dice que ofreció salvoconductos a los transportistas 'atrapados' en Sierra Leona y ellos lo niegan

Esperan reunirse con el embajador esta semana

Los transportistas leoneses Antonio y Ramiro y Juan Carlos, asturiano con familia en Boñar.

Los transportistas leoneses Antonio y Ramiro y Juan Carlos, asturiano con familia en Boñar.

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Elena F. Gordón / ICAL

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El Ministerio de Asuntos Exteriores asegura que los transportistas autónomos ‘atrapados’ en Sierra Leona recibieron el apoyo de la embajada española cuando lo solicitaron e incluso se les llegó a ofrecer salvoconductos para que pudieran regresar a España. El grupo, formado por dos leoneses, un asturiano, un vasco y dos valencianos, rechaza que se produjese esa oferta y, en cualquier caso, insisten en que necesitan recuperar su documentación y sus vehículos.

«No nos ofrecieron ningún tipo de salvoconducto pero tampoco lo queremos. Queremos recuperar nuestros camiones y nuestros pasaportes y poder trabajar aquí. No queremos caridad del Gobierno español sino que se haga justicia y que trabajen por los españoles. Que recuperen los pasaportes, que son propiedad del Gobierno español», señaló esta tarde Ramiro, uno de los dos leoneses que residen actualmente en Freetown, la capital del país africano.

Fuentes de Exteriores aseguraron a Ical que el personal de la Embajada mantiene contacto telefónico con ellos y que «continua a su disposición» y destacaron que el embajador, Fernando Morán Calvo-Sotelo, que reside en Abiyán (Costa de Marfil), se desplazó a Sierra Leona hace semanas para reunirse con los camioneros y hacen un seguimiento de su situación.

«De momento sólo hemos conseguido de ellos palabras vacías. A ver si puede venir esta semana el embajador y nos dice las cosas cara a cara», responden desde África los afectados. «Quizá en lo laboral no pueda ayudarnos pero tienen que protegernos y no vemos que lo hagan», añaden.

Además, lamentan que al requerimiento de la esposa de uno de los valencianos para que repatriasen a su marido porque estaba pasando la malaria por tercera vez la respuesta fuese «que no había dinero». «No hemos podido costearle la medicación y, no sabemos cómo, gracias a Dios se ha recuperado», concluyen.

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