Diario de León

ENTREVISTA

«Hay pistas de la peregrina desaparecida y confiamos en que alguna fructifique»

Jorge Fernández Díaz, ministro del Interior, no es partidario de que se sepa dónde están los radares colocados

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en la entrevista realizada en el Incibe el jueves

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en la entrevista realizada en el Incibe el jueves

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ASUN G. PUENTE | LEÓN
León

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Con la amenaza permanente del terrorismo yihadista, y un nivel de alerta 4 (riesgo alto) en España, el ministro del Interior insiste en la necesidad de bloquear desde el ciberespacio el avance de este movimiento islámico. Cree que la respuesta inmediata desde el CERT, en el Incibe, es vital. Repasa también el caso de la peregrina, la polémica de los radares y la de los incendios.

 

—Uno de los frentes de la lucha antiterrorista, el ciberespacio, cuenta en León con uno de sus puntales a través del CERT en el Incibe, ¿cómo se trabaja desde aquí para dar respuesta a los ataques?

—El Ministerio del Interior está presente en el Incibe en el CERT, el equipo de respuesta frente a ataques cibernéticos, fundamentalmente a través de la Secretaría de Estado de Seguridad, con la labor que realiza con el Centro Nacional de Protección de las Infraestructuras Críticas, y también a través de todo lo que significa presencia aquí de las fuerzas de seguridad destinadas a la lucha antiterrorista. La coordinación entre Interior y el Incibe es lo que da lugar al CERT, es un centro absolutamente de referencia no sólo a nivel nacional, sino internacional. España está considerada una referencia internacional en la lucha antiterrorista, eso es así porque hay pocos países que han sufrido con tanta intensidad y durante tanto tiempo como España el terrorismo. Ciertamente diferente al terrorismo internacional yihadista, que hoy nos amenaza a todos. Estoy hablando del terrorismo del Grapo y fundamentalmente del de ETA, muy diferente en su modus operandi, aunque con un denominador común: terrorismo. El haber padecido durante décadas este terrorismo nos ha obligado a especializarnos en la lucha antiterrorista, de tal manera que hemos hecho de la necesidad de hacer frente al terrorismo la virtud de la especialización en la lucha antiterrorista. Además el 11 de marzo de 2014 España padeció el mayor atentado terrorista de la historia de Europa, obra del yihadismo, desde ese momento tuvimos que especializarnos en la lucha contra el terrorismo yihadista.

—Insiste en que la ciberseguridad se ha convertido en un elemento clave en la lucha contra el yihadismo, donde León también tiene la palabra.

—De la misma manera que en el espacio físico se producen crímenes y delitos hay delincuencia en el ciberespacio también. Estamos hablando de la cibercriminalidad, de la ciberdelincuencia. Consecuentemente tiene que haber la ciberseguridad para hacerlas frente. Evidentemente de la misma manera que el terrorismo se desarrolla en el espacio físico, ahora está utilizando el ciberespacio de modo muy especial el terrorismo yihadista, como un elemento fundamentalmente para su actividad. El modus operandi del yihadismo encuentra en el ciberespacio su elemento fundamental de propaganda, de captación, de adoctrinamiento, de radicalización y reclutamiento de terroristas. Por tanto, frente al ciberterrorismo, instrumento fundamental para el terrorismo yihadista, aparece lógicamente la ciberseguridad. Y este centro en el que estamos aquí en León, el CERT en el seno del Incibe, es una herramienta fundamental a esos efectos porque nos está permitiendo innovar, formar, diagnosticar y hacer frente con mucha mayor eficacia a la amenaza del terrorismo y también a todo tipo de amenaza que se produce en el ciberespacio y que afecta a nuestras empresas, infraestructuras críticas, que afecta en definitiva a los intereses de España, tanto en el ámbito público como en el privado.

—La inversión extraordinaria de diez millones que ha anunciado para reforzar la lucha antiterrorista, ¿llegará también para potenciar y ampliar los medios de los que se dispone en el Incibe para este objetivo?

—Lo que sí que puedo decir que en lo que se refiere al Ministerio del Interior y en el contexto del Pacto Antiterrorista, que firmó el presidente del Gobierno con el PSOE el 2 de febrero, permitió que se reformara el Código Penal y también se incluyera el compromiso del Gobierno de promover la dotación de más recursos humanos y tecnológicos para que la comunidad de inteligencia y los servicios especializados en la lucha antiterrorista contara con mejores dotaciones y, por tanto, pudieran ser más eficaces. En un reciente Real Decreto Ley se ha previsto un crédito extraordinario, que ya está aprobado, de 10 millones que va destinado de manera específica para esta finalidad en la lucha antiterrorista. Evidentemente, en la medida en que esos medios son para unidades especializadas de la Policía, la Guardia Civil y el centro de inteligencia contra el terrorismo y el crimen organizado del Ministerio del Interior (para los que van destinados esos diez millones de euros), aquí concretamente en el CERT van a tener evidentemente una especial traducción.

—Habla del yihadismo como una compleja amenaza y precisamente fija en el ciberespacio uno de sus principales caldos de cultivo para sus labores de propaganda y captación.

—Hasta el año 2012 el 80% de las labores de propaganda, captación, adoctrinamiento y radicalización del Daesh se producían en el entorno de los centros de culto y en las prisiones. En estos momentos se ha invertido de tal modo la situación que es en el ciberespacio donde se producen estos procesos en un 80%. Añado otro dato para que se vea la complejidad de la amenaza: el tiempo medio desde que se inicia este proceso de captación, para pasar por las distintas etapas de la radicalización, hasta que ya están en condiciones de plantear y ejecutar un atentado o desplazarse para integrarse en el Daesh y combatir en zona de conflicto (Libia, Siria, Irak...) está entre dos y seis meses. Si unimos ciberespacio con un proceso de radicalización y de formación nos damos cuenta de la complejidad.

—¿Y cómo abordan el emergente movimiento de captación de jóvenes, incluso adolescentes, en España rumbo a lugares de conflicto?

—Lo que estamos viendo en la tipología delictiva, en el caso del yihadismo, es que efectivamente cada vez son más jóvenes y efectivamente la emergencia ya no solo de varones, sino de mujeres y no sólo maduras, también adolescentes e incluso niñas. De tal manera que existen células integradas por mujeres exclusivamente dedicadas a captar a mujeres, adolescentes e incluso niñas para desplazarse e integrarse en el Daesh sirviendo, en no pocas ocasiones, como esclavas sexuales o realizando otras funciones que evidentemente son incompatibles con la dignidad humana.

—La trepidante evolución de la delincuencia y fenómenos como el terrorismo islámico, ¿exige una permanente adaptación del Código Penal?

—La respuesta es sí. De hecho, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad un llamamiento a la comunidad internacional en una resolución para que adaptara los ordenamientos jurídicos de todos los estados presentes en la ONU a la nueva amenaza que representa el terrorismo internacional. Debo decir que hoy en día y desde el pasado 1 de julio, que entró en vigor la reforma del Código Penal, España está a la vanguardia de los ordenamientos jurídicos del mundo respondiendo a este llamamiento de Naciones Unidas porque se ha dotado de un Código Penal en el que con la mayor de las precisiones de tipo jurídico se han tipificado todas aquellas conductas que responden al patrón de actuación del terrorismo yihadista. El Código Penal anterior nos dotó de las herramientas legales que el estado de derecho necesitaba para hacer frente a un terrorismo como el de ETA. Hoy la derrota operativa y policial de ETA es una realidad, pero el modus operandi del terrorismo yihadista es distinto y si estas conductas no están bien tipificadas en el Código Penal pues evidentemente las fuerzas de seguridad de la lucha antiterrorista no tienen las herramientas legales para que su trabajo operativo pueda ser lo eficaz que debe ser y lógicamente tampoco los fiscales las tenían para tomar las decisiones que procedieran.

—León se enfrenta a un duro verano de incendios, como el resto de España, la intencionalidad de la mayoría de ellos hace clamar a la población por mayores castigos y lamentar la impunidad con los que muchos fuegos transcurren. ¿Se plantean mayores penas?

—El Código Penal ya fue reformado precisamente para que estas conductas fueran sancionadas con mayor intensidad, dada la gravedad de las consecuencias, no sólo en el caso de incendios provocados, sino los que se producen por negligencias. Ponen en riesgo vidas humanas, ocasionan cuantiosas pérdidas en medios materiales y exigen además la inversión de cuantiosos recursos de todo tipo para la prevención y extinción. Yo creo que efectivamente cuando estamos ante una temporada como la que vivimos, con esta ola de calor que sufrimos, vuelve a ponerse sobre el tapete el debate sobre si las penas son las adecuadas o no para la gravedad de los delitos que se comenten. En todo caso, el Código Penal no puede estar permanentemente reformándose; no es bueno legislar en caliente.

—¿Redoblarán las labores de vigilancia de las fuerzas de seguridad en puntos vulnerables de ser pasto de las llamas ante las constantes olas de calor?

—Siempre cabe la labor de intensificar más el trabajo de prevención, pero debo de decir que frente a las conductas de las personas que de manera intencionada comenten delitos es evidente que es muy difícil. No podemos poner un policía o un guardia civil ante cada ciudadano. Creo sinceramente que la labor que realizan las Fuerzas de Seguridad del Estado en este caso, y sin perjuicio de que todo en la vida es mejorable, es una buena labor. Y es verdad que como se dice habitualmente los incendios de verano se previenen en otoño y en invierno y eso así. La labor del Ministerio de Medio Ambiente se ha intensificado de manera muy especial, otra cosa es que tenemos que reconocer que nos encontramos ante un verano muy excepcional. Y los medios humanos y técnicos que se están poniendo a disposición son muy intensos, como ha ocurrido aquí con el incendio de Quintana del Castillo. También quiero destacar las labores que realiza la UME y las que desarrolla la propia Junta de Castilla y León

"Está demostrado que el

calor aumenta las conductas

agresivas, con intensidad

en la violencia de género"

 

—¿Hay avances en la investigación en el caso de la desaparición de la peregrina norteamericana en el Camino de Santiago a su paso por la provincia?

—Debo decir que el caso de la desaparición de esta persona, que fue en Semana Santa, sé la alarma social que ha generado. Tanto la Policía como la Guardia Civil están actuando. La investigación sigue abierta y muy intensamente. Están trabajando de manera muy coordinada y muy estrecha unidades especiales de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. Hay diversas pistas y líneas de investigación abiertas y no puedo ser más explícito. Pero confíamos en que alguna de ellas, y tenemos fundadas esperanzas, pueda fructificar.

—Dada la alarma social generada, la importancia internacional de la Ruta Jacobea y los miles de peregrinos que la recorren cada año, ¿Interior se plantea crear un cuerpo policial especial para la vigilancia exclusiva de esta vía?

—Honradamente no nos hemos planteado una policía especial para el Camino de Santiago. Los datos de los que disponíamos no nos hacían pensar en la necesidad de reforzar la seguridad ya existente, lo cual no significa que no estemos abiertos a que se pueda hacer.

—Desde que la DGT decidió anunciar la ubicación de sus radares, muchos ayuntamientos han seguido su camino, hace unos días lo hizo el de León. ¿Cree eficaz esta medida, tendrá resultados positivos?

—Todos compartimos el objetivo de reducir la siniestraliedad e incrementar la seguridad vial, tanto los ayuntamientos, como el Ministerio del Interior y la DGT. Somos el quinto país del mundo en seguridad vial, lo digo no con conformismo ni con vanagloria, pero también hay que saber dónde estamos. Hay quien considera que para conseguir estos objetivos es mejor dar información de dónde y cuándo están esos radares instalados y hay quien considera lo contrario, ese es un debate que está abierto.

—¿Y el ministro del Interior qué piensa?

—Yo considero que es mejor no identificar dónde y cuándo se sitúan los radares. Se lo digo sinceramente. Pero en fin, yo estoy abierto, como es evidente, a que los expertos me convenzan de lo contrario. En un momento determinado, la DGT consideró que era mejor optar por esta política de transparencia, vamos a probar. Evidentemente al final haremos una evaluación. Si esta política es más eficaz, la mantendremos y si no tendremos que rectificar.

 

"Yo considero que es mejor

no identificar dónde y cuándo

se sitúan los radares, Se lo

digo sinceramente"

—¿Por qué no se incrementan las campañas contra la violencia de género en verano, cuando se constata que más mujeres mueren asesinadas?

—Efectivamente se nota un repunte estacional. De la misma manera que en el verano es cuando más se producen incendios forestales, también hay patrones de conducta donde la estacionalidad tiene mucho que ver. Y efectivamente hay una correlación positiva, que empíricamente ya está demostrada, entre estas temporadas de calor y el desarrollo de conductas agresivas que se proyectan con especial intensidad en violencia de género. Una vez constatado, lo que le puedo asegurar es que es un tema que tenemos presente en el Ministerio del Interior y que es bueno que esta reflexión y experiencia se traduzcan en planes especiales.

 

 

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