Pilastras y hormigón para salvar Lancia
La A-60 ya se dibuja continua desde el punto kilométrico 299 de la Nacional 601 hasta la orilla del Porma; con enlaces incluidos. JESÚS
No llegan las obras al tramo que esconde los vestigios de Lancia; pero llegarán en forma de alternativa al proyecto inicial, imposible de llevar adelante sin arrasar el yacimiento que descubrieron las máquinas cuando hace seis años empujaban el trazado de la autovía en la ribera que une los ríos Esla y Porma. Llegarán las obras para elevar los ramales de la A-60 sobre los restos sepultados; se utilizará una estructura de viaducto, de un kilómetro de longitud. Ese es el proyecto que se debe acometer con el visto bueno de los responsables de Patrimonio. La solución pemite avanzar por la zona con la nueva vía sin tener que buscar un trazado paralelo (lo que dispararía el coste de ejecución por nuevas expropiaciones y enlaces al recorrido ya fijado. En la zona ya se han acometido algunas actuaciones necesarias para definir la obra, asentada en hormigón y pilastras.