El despacho de Perrault no sabe cómo se acabará el Palacio de Congresos

Con el proyecto a medias, el despacho de arquitectura de Dominique Perrault admitió ayer que se encuentra «a la espera» de ver cómo se remata el complejo. Sin que el Ayuntamiento haya sacado a licitación todavía el contrato para hacer la envolvente de la vieja Azucarera Santa Elvira, como tiene previsto desde hace dos años, el representante del galo en España, José Fernández Andrino, insistió en que no conocen los plazos que se manejan, pero dejó entrever que el tercero de los edificios, tras el Palacín y el Palacio de Exposiciones, es necesario para «completar la oferta congresual».

Fernández Andrino expuso la postura dentro de las conferencias del congreso ITE+3R, en el que intervino en lugar de Perrault, quien estaba previsto que disertara sobre el proyecto pero excusó su presencia la tarde anterior. Pese a la ausencia del autor de los planos, el arquitecto responsable del despacho en España, quien además ha seguido toda la dirección de obra, reconoció que los resultados «prácticamente coinciden al 98% con lo que se ideó en el proyecto y se esperaba», después de que lograran frenar la intención del anterior equipo de gobierno municipal de quitar parte de las placas fotovoltaicas de la emblemática cubierta.

El arquitecto delegado de Perrault en España insistió en su «satisfacción» con el resultado e invitó a los asistentes a la ponencia, celebrada en el Palacio de Exposiciones, a que examinaran «si se parece» al proyecto. Desde este punto de partida, desarrolló una intervención en la que describió «la gestación del proyecto de León con la llegada del AVE» e incidió en «el papel de la regeneración de la antigua azucarera para el urbanismo de toda la ciudad». Como contrapunto, Fernández Andrino expuso además otras dos «formas diferentes de aproximarse a la rehabilitación de edificios históricos y de patrimonio»: una fábrica Babcook de París como ejemplo de arquitectura industrial del siglo XX y la rehabilitación de una parte del palacio de Versalles.

La intervención formó parte de la segunda jornada del congreso, en la que se abordaron «temas de financiación, de activismo social y de inteligencia artificial aplicada al urbanismo del futuro», como trasladaron los organizadores, que contabilizaron «más de 600 profesionales» participantes.