Diario de León

El solar donde vivió el bufón de Fernando III

La finca, en la que irán 30 viviendas de lujo, suma incendios, expropiaciones forzosas y ahora la demolición de las fachadas protegidas

El permiso de Patrimonio se limita por ahora a la construcción de los muros perimetrales y la excavación del sótano. FERNANDO OTERO

El permiso de Patrimonio se limita por ahora a la construcción de los muros perimetrales y la excavación del sótano. FERNANDO OTERO

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El último accidente se enmarca en la historia de un solar que acumula en los últimos más de 20 años un currículum de sucesos que ahora desembocan en la construcción de 30 viviendas de lujo. Un incendio, una expropiación forzosa por ruina y ahora el derribo de las fachadas de La Rúa marcan el avance de un suelo bajo el que se esconden las huellas de León, como se ha comprobado ya con la aparición de los primeros restos arqueológicos: un anillo de oro de cronología romana y una vasija completa de época medieval, el molde que sirvió para fundir una campana y útiles de una antigua curtiduría de pieles. Pero, además, anota el rastro de la historia de la ciudad con referencia a los personajes que la habitaban y que tuvieron casa en este enclave, como el juglar Paya, el bufón con el que el rey de León Fernando III entró en Sevilla, como apunta el historiador Alejandro Valderas.

El solar empezó a despoblarse con la expropiación forzosa en mayo de 1999 de la casa que daba a la plaza de San Marcelo, colindante con el Recreo Industrial. El Ayuntamiento aprobó entonces una fórmula sin apenas precedentes por la que incluía la finca en el «Registro de Solares y otros inmuebles de edificación forzosa». El documento recogía además la necesidad de indemnización a los tres inquilinos, quienes reclamaban 7.700.400, 5.627.040 y 5.454.000 pesetas, respectivamente. Sin habitantes ya, el inmueble, al que se catalogó de «ruina inminente», no se cayó hasta que actuó la piqueta el pasado año dentro ya de las obras de construcción del complejo de viviendas de lujo.

Por las mismas fechas del expediente se anota el incendio sufrido en la casa del número 18 de La Rúa, en la que se asentaba la academia que tomaba el nombre de la calle. El suceso provocó el derribo interior, pero como testigo quedó la «fachada de arcos de piedra de mármol de las canteras de la zona de Lois, que tenía la factura propia de las casas del Cabildo Catedral de León, de la segunda mitad del siglo XVIII», como apunta Valderas. Al lado derecho, se conservaba «un panel de piedra de Boñar muy destrozada por la humedad, que podría ser de la Alta Edad Media, resto de una edificación previa», reseña el historiador, quien abunda en que en esta zona «hubo dos casas muy famosas antes del siglo XV: la ‘Casa del Arco’ y la ‘Casa del Juglar Paya’, cortesano que acompañó a Fernando III el Santo en la toma de Sevilla y redactó poemas festivos sobre la fiesta tras la conquista».

El solar, en el que estaba también la casa modernista del número 18 de La Rúa, en la que estuvo Muebles Gago, ya no tiene ahora obstáculos en el exterior. Aunque dentro, el permiso de Patrimonio sólo permite ejecutar los muros perimetrales. En los sótanos que ahora se excavan con «cautelas arqueológicas» hay huellas de León.

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