Diario de León

Detenida una leonesa que abandonó a su hijo de diecisiete años en Lugo

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Una mujer buscada por la justicia en León fue detenida en la ciudad de Lugo después de que su hijo menor de edad fuese localizado en la calle, donde había pasado la noche.

Según informó en un comunicado la comisaría de la Policía Local de Lugo, el menor, de 17 años de edad, fue identificado a las 08.40 horas del viernes cuando se encontraba tendido sobre la vía pública con varias maletas a su alrededor.

El varón relató a la patrulla de agentes que se había despertado sólo después de pasar la madrugada en la calle junto a su hermano gemelo tras separarse de su madre, con la que habían dormido la noche anterior.

Los agentes lograron localizar a la madre del menor, que dijo estar de viaje y se comprometió a recoger a su hijo en breve.

Después de que transcurriesen varias horas sin noticias de la mujer, la policía decidió la apertura de diligencias por un posible delito de abandono del menor.

En el proceso de instrucción, comprobaron que existía una requisitoria para detención contra esta madre por parte de la Fiscalía de León, por lo que procedieron a su arresto para ponerla a disposición de este organismo. Al cierre de esta edición aún no había constancia de que se hubiese realizado el traslado, aunque estaba previsto que se llevara a cabo.

Este delito se regula en el artículo 229 del Código Penal. La acción consiste en abandonar a un menor de edad o persona discapacitada y necesitada de especial protección por parte de una persona encargada de su guarda, al que se castigará con una pena de prisión de uno a dos años. En caso de que los que abandonen sean los progenitores, tutores o guardadores legales, la pena a imponer será prisión de 18 meses a tres años.

Si, por las circunstancias del abandono, se pone en peligro la vida, salud, integridad física o libertad sexual del menor de edad o de la persona con discapacidad necesitada de especial protección, se impondrá la pena de prisión de dos a cuatro años, sin perjuicio de castigar el hecho como corresponda si constituyera otro delito más grave.

Previamente, en cualquier caso, hay que escuchar la versión de la madre y conocer cuál es el motivo que argumenta para que se hayan producido estas circunstancias y que los hechos se hayan llegado a desarrollar en la forma en la que han tenido lugar en su versión.

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