Los operarios del Centro Estrada piden a la DGT que medie para mejorar su salario

Más de 200 trabajadores del Centro Estrada de León protagonizaron ayer una marcha desde la sede hasta las puertas de la Dirección Provincial de Tráfico para reivindicar «mejoras salariales y sociales», así como para pedir la implicación de la DGT y de la Administración para que «las condiciones laborales se adecúen al pliego de licitación» adjudicado a la UTE compuesta por Indra, Kpasch y Wordline.

En la primera de las jornadas de huelga convocadas para esta semana —la segunda se celebrará el viernes— los sindicatos cifraron en un 90% del total de 270 empleados los que secundaron la movilización tras «años de precariedad económica» para reivindicar «una subida que por lo menos mejore el IPC», mientras que la empresa propone un incremento del 1%para los cuatro próximos años.

Así lo señaló Sara Rebollo, de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios, para quien la propuesta de la empresa «no se ajusta a las necesidades y tareas del centro de documentación de tráfico» que «trabaja para el servicio público a través de la atención telefónica del 060» y lleva a cabo «trámites que pertenecen a las jefaturas de tráfico a nivel nacional».

Por este motivo, solicitó la implicación de la Dirección General de Tráfico, ya que «ha licitado a el contrato a la UTE Centro Estrada y ha estimado una mejora salarial respecto al IPC que no se está dando en 2024», en declaraciones a la Agencia Ical. Coincidió en esta petición el representante de la Unión General de Trabajadores, Carlos Vallaure, quien insistió en que la Administración «ha licitado un concurso público con unas condiciones salariales que la empresa no está trasladando» mientras que «ni tan siquiera reconoce lo que la propia negociación colectiva a nivel estatal tiene estipulado con la Confederación Española de Organizaciones Empresariales».

«Aquí nos tiene la dirección de la empresa, es hora de que se siente con nosotros y empiece a negociar como Dios manda», enfatizó Vallaure, al tiempo que reivindicó que «se tome en serio a la plantilla». «No pedimos una locura, sino que se equipare nuestro al día a día del resto de gremios porque no puede ser que un servicio público se deteriore de esta forma», añadió el representante de Comisiones Obreras, Jesús Marín. «Se nos está precarizando, a pesar de que estamos realizando un trabajo cualificado y nuestras condiciones no se ajustan ni a lo más básico de un funcionario», lamentó el representante sindical, tras incidir en que el 90% de los trabajadores del centro habían secundado la primera de las medidas de protesto organizadas para reivindicar mejoras salariales y laborales.