Hacienda abre una vía para devolver a 40.000 leoneses lo que han tributado de más

Comenzó como una reclamación de la Mutualidad Laboral de Banca y se ha extendido a los numerosos colectivos de trabajadores que aportaron parte de sus salarios a las mutualidades hasta finales de 1978, antes de la creación de la Seguridad Social, que luego las fue absorbiendo. Hoy la marea de mutualistas jubilados que han cotizado doblemente ejerce su derecho no sólo a la rebaja proporcional en sus tributaciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), sino a la devolución de lo cotizado de más en los últimos cuatro años fiscales, que son los que no han prescrito legalmente. La Agencia Tributaria prepara un portal de vía rápida de gestión que pondrá en marcha el 20 de marzo, y se arma para una avalancha de devoluciones a los jubilados que llevan décadas tributando de más, según la resolución del Tribunal Supremo.

Entre los jubilados leoneses la primera demanda, la presentada por la banca, afectaba a unas 2.000 personas. Ahora los posibles beneficiarios de este recálculo pueden superar los 40.000, según las cuentas que realiza Pablo Roberto Herrero, abogado y presidente ejecutivo de RBH Global, que lleva ya un buen número de casos de afectados en León. Su equipo calcula que un tercio de los trabajadores en activo en aquellos años (que eran alrededor de 150.000) realizaron aportaciones a las mutualidades, porque estos organismos no sólo funcionaban en la banca, también eran la fórmula de ahorro sectorial de minería, metalurgia, comercio, Correos, Renfe, electricidad, construcción,... El alcance de la sentencia llega también a empleados públicos, como policías y profesores. Más allá de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface), la sentencia del Supremo afecta a quienes cotizaron en distintas mutualidades y montepíos.

La Agencia Tributaria habilita a partir del próximo 20 de marzo un formulario en su sede electrónica para gestionar el IRPF correspondientes al período 2019-2023 de los pensionistas que cotizaron a mutualidades. En principio no será necesario adjuntar a la solicitud ningún tipo de documentación, según explica la agencia, porque cuenta con la vida laboral de los solicitantes. Aunque apunta que en caso de que «no se pueda resolver una solicitud concreta con la información disponible, la Agencia Tributaria pedirá a los interesados posteriormente que aporten la documentación necesaria». Ahí será donde los interesados tendrán que hacer acopio de sus documentos para aportar la información necesaria para llevar adelante sus reclamaciones.

Todo este procedimiento tiene su origen en la reclamación de los trabajadores de la banca y en la sentencia del Tribunal Supremo de febrero del año pasado que reconoció los derechos de los trabajadores que cotizaron en aquella mutualidad hasta 1978 a devolverles lo tributado de más en sus pensiones. El fondo de la cuestión reconoce que miles de pensionistas cotizaron en las mutualidades sectoriales o de las empresas que formaron el sistema anterior a la creación de la Seguridad Social; pero los cálculos posteriores del nuevo sistema gravaron doblemente sus contribuciones.

La sentencia

La sentencia de febrero del año pasado reconoce a los pensionistas que cotizaron en la Mutualidad Laboral de Banca el derecho a una reducción fiscal del 100% de lo cotizado hasta 1966; y del 25% de lo cotizado desde el 1 de enero de 1967 al 31 de diciembre de 1978.

Es este porcentaje el que debe aplicarse sobre toda la vida laboral que tributa. La reducción fiscal se aplica sobre lo aportado a las mutualidades. Y eso tiene una doble vía en las cuentas con Hacienda actuales: implica la devolución de lo tributado de más en los ejercicios fiscales que no han prescrito (de 2019 a 2022 si se reclama antes del 30 de junio); pero también una rebaja fiscal en las declaraciones del IRPF a futuro, con la reducción porcentual que corresponda.

Los plazos

Aunque la doble tributación de los miles de trabajadores leoneses está reconocida por la sentencia del Tribunal Supremo, los períodos de recuperación de los derechos perdidos están acotados por la legislación tributaria. Todo derecho prescribe y a día de hoy sólo se puede reclamar lo pagado de más desde el ejercicio de 2019.

Los despachos de abogados que gestionan estas reclamaciones advierten también sobre los plazos para exigir reclamaciones: la declaración del IRPF de 2023 concluye a finales de junio de este año, así que lo que no se haya reclamado con anterioridad a esa fecha pierde validez un año más. Es decir, si se reclama a partir de julio, sólo podrá exigirse reparo sobre lo tributado desde 2020.