Un café en el bar, a 2€ en enero

Cuántas veces tomar un café en un bar es una excusa para tomar un respiro, una primera cita, una charla con amigos, un encuentro de trabajo... Unos minutos, en los que paladear el caliente líquido, aunque en verano se tome con hielo, que a partir del mes de enero será todavía un poco más caro. En los bares y cafeterías leonesas -con una media de cinco establecimientos por cada mil habitantes- el precio de la taza de café supera ya los 1,50 euros en la mayoría de ellos, pero ante la falta de abastecimiento y el consiguiente encarecimiento de la materia prima y el coste de los fletes, la taza podría estar, a principios de 2025, en los 2 euros.

El presidente de la Asociación de Hostelería de León, Óscar García, calcula que esa será la cifra que podrá alcanzar el café en León. «A principios de año casi todos los productos suben, se actualiza la lista de precios, y las subidas se tienen que repercutir en el importe que paga el cliente, porque si no el negocio no es rentable», señala el portavoz de los hosteleros leoneses, quien confía en que esa subida «no marque mucho, pero cualquier incremento del precio hace daño. Los clientes se quejan con razón, pero subimos los precios porque nos los suben a nosotros».

La distribuidora Café Candelas, así lo confirma. El precio del café arábiga, que junto con la variedad robusta es uno de los más consumidos a nivel mundial, alcanzó esta semana su nivel más alto desde 1977, con una cotización por libra a 3,20 dólares, con lo que este año ha registrado una subida del 70%. «El aumento del precio de las materias primas es una realidad que se arrastra desde hace varios años y no se espera una reducción a corto plazo», precisa desde Cafés Candelas el director de Compras, Andrés Alonso. Desde esta distribuidora señalan que entre los factores que confluyen en este momento están «el cambio climático, que afecta a las cosechas de café, la escasez de la mano de obra y los problemas de abastecimiento debido a los bloqueos que sufre el transporte marítimo en los canales de Panamá o Suez». A mayores, Alonso añade otra «variable importante» como es «el aumento de la demanda de café en mercados emergentes como China o India, zonas en las que hasta ahora no había cultura de café».

Óscar García precisa que la subida del café no será sólo en los bares, ya que la escasez de materia prima también incrementará su precio en los supermercados, para el consumo particular. De hecho, el café o el cacao son dos de los productos de la cesta de la compra que, según el Índice de Precios al Consumo, más se han encarecido. Así que, tomarse un café para despertar, un elemento clave en el desayuno de gran parte de los adultos, el café de después de comer, también será un poco más caro a partir del próximo año.

«Pese a la tormenta perfecta, el café seguirá siendo un producto al alcance del consumidor. La subida no lo convertirá en un artículo de lujo»

La situación del elevado precio del café es a nivel mundial. Brasil es uno de los principales productores de estas bayas y el país se enfrenta a su temporada más seca desde 1981, lo que ha dañado a los cafetos, como se llama a la planta, durante la fase de floración, lo que ha reducido las perspectivas de la cosecha brasileña no sólo para el próximo año, también para 2026, según algunos analistas internacionales. En Colombia, el que fuera el país líder en la exportación de café, el cacao está ganando terreno a la producción cafetera, como consecuencia de las plagas y la falta de mano de obra para la recolección.

«A pesar de este cúmulo de circunstancias o tormenta perfecta, el café seguirá siendo un producto al alcance de los consumidores. Es posible que experimente un aumento de precio en los próximos meses, pero no será tan grande como para que se convierta en un producto exclusivo o de lujo», remarca el director de Compras de Candela, una de las distribuidoras con gran presencia en la provincia de León.