Los sindicatos del metal rompen la negociación con la patronal

Los sindicatos UGT y CC.OO. mantienen la convocatoria de cuatro días de huelga para la próxima semana después de que ayer no hubiera ningún acercamiento de posturas en la reunión mantenida con la patronal. Además, los agentes sociales estudiarán nuevas movilizaciones, entre ellas un paro indefinido, en el transcurso de sendas asambleas, en León y en Ponferrada, que tendrá lugar el próximo lunes y en la que informarán a los trabajadores del estado de la negociación. En el transcurso de la reunión de ayer, los sindicatos plantearon como última propuesta aceptar cualquier planteamiento de la patronal para revisar el IPC, que ya fue consensuado en otras provincias de la Comunidad. Según los sindicatos, los empresarios adscritos a la Fele no aceptaron este planteamiento, lo que motivó que después de dos horas de reunión la parte social decidiera levantarse de la mesa de negociación. «Seguimos separados por la cláusula de revisión salarial y mientras no se solucione esto no habrá acuerdo», dijo el secretario provincial del sector minerometalúrgico de CC.OO., Alberto González Llamas. Por su parte, la patronal mantiene abierta la puerta del diálogo con los trabajadores del metal. La Fele está dispuesta a volver a sentarse con los sindicatos para intentar llegar a un acuerdo que ponga fin a este conflicto. Pérdidas económicas El presidente de Fele-Bierzo, Manuel Ángel Fernández Arias insiste en que la patronal no puede dar «un duro más» de lo que ya han ofrecido. «No estamos hablando de una guerra a muerte, dónde hay vencedores y vencidos. Estamos decidiendo de un convenio dónde por lo menos la parte empresarial está intentando echar unas cuentas lo más que podemos dar pero por supuesto lo que no podemos hacer es tener una alegría que pueda repercutir fuertemente en el futuro de nuestras empresas» esgrimió Fernández Arias. La patronal insiste que no es factible aprobar una cláusula de revisión similar a las existentes en las otras provincias de la comunidad y confía en que los trabajadores recapaciten. Los empresarios insisten en que las pérdidas económicas que han ocasionado los días de huelga de perjudican por igual a la patronal y la parte social.