«En León hacen falta infraestructuras»

Victoria Delgado abandona el cargo de directora del parque nacional de Picos de Europa tras cuatro años de gestión del emblema natural de la Cordillera Cantábrica. Las diferencias con sus superiores en Parques Nacionales la llevaron hace unas semanas a pedir su cese y pretende volver a su cargo de funcionaria. Esta ovetense de 44 años, casada y con dos hijos, se siente satisfecha de los avances, pero reconoce que quedan retos importantes para quien la sustituya. En especial, el desarrollo en la vertiente que califica como «joya de la corona» del espacio, la leonesa. Y un aspecto que levantará ampollas, la supresión definitiva de la caza en este espacio protegido de nuestra provincia. -¿En que ha mejorado el parque de Picos de Europa en los últimos años? -En cómo valora el ciudadano a este parque. Es el más querido, el más valorado, el mejor considerado por los visitantes frente a la totalidad de espacios protegidos que existen en nuestro país, que de acuerdo con los datos de Europark son más de 900. También estoy muy satisfecha de que durante estos cuatro años Picos se ha consolidado como espacio protegido, consolidación que viene de la aceptación por parte de la sociedad. Fue creado con muchas hostilidades y sin demasiado consenso. Y eso generó muchísimas tensiones sobretodo en las vertientes asturiana y leonesa. -¿Cree que eso se ha superado? -Aún falta un poco más de madurez. Pero frente a la situación que había desde 1995 al 2000 cuando fue una fuente de conflictos sociales, durante estos cuatro años no se dieron con la misma virulencia. Aunque hay que limar todavía ciertas asperezas. -¿Ha podido ayudar quizá la aprobación del Plan Rector de Uso y Gestión? -El PRUG y la gestión absolutamente transparente. Siempre estuve dispuesta para lo que hiciera falta; y eso los ciudadanos lo perciben, que pueden estar en desacuerdo o no con las decisiones adoptadas pero que es así. Y fue un verdadero logro la declaración de Reserva de la Biosfera en julio del 2002. -¿Qué significa este reconocimiento? -Tener un sello de calidad que confiere un organismo de la talla de la Unesco y universalmente reconocido da prestigio y es una puesta en valor mucho mayor que antes. Trata de compatibilizar la existencia de una preservación del medio ambiente con presencia de las actividades económicas y de la población. Este parque es el único de los trece nacionales que tiene población en su interior. No sólo encierra valores naturales sino que se concilian con la existencia de población que desarrolla actividades económicas y trabajo. No me cabe duda de que eso los visitantes, el turismo de calidad, lo saben apreciar. Y cuantos más tengamos más evolución y ascenso de la economía en la población local. -Quizá de estar poblado vengan los mayores problemas. -Todos los parques nacionales han de gestionarse bajo unos principios básicos, pero tieniendo en cuenta sus características intrínsecas. No es lo mismo Tablas de Daimiel que Doñana, ni éste igual que Picos de Europa o Garajonai. La excepcionalidad de Picos obliga a tener un equilibrio entre la claridad en la dirección por la que debemos seguir y un talante comprensivo de todas las reivindicaciones que hace la población. Eso hace que la gestión sea complicada, pero es un reto tanto para ellos como para los gestores. -¿La población está convencida del beneficio que el parque puede tener? -La vertiente donde existen todavía reticencias es precisamente la leonesa. Pero es indispensable que se den cuenta de que tienen la joya de la corona del parque. Es la vertiente más espectacular de Picos. Es verdad que hacen falta infraestructuras, mayor desarrollo y relanzamiento económico. Pero creo que debe de hacerse progresivamente. Como progresivamente los ciudadanos han de darse cuenta de que es una fuente de riqueza para las economías de Posada de Valdeón y Oseja de Sajambre. Estoy convencida de que no tardando mucho los ciudadanos comprenderán que hay infinitamente más ventajas que inconvenientes por vivir dentro del parque. -Quizá ese siga siendo el gran reto pendiente, las infraestructuras y servicios. -El reto inmediato en la vertiente leonesa es el desarrollo del PRUG y las inversiones inherentes al anejo económico, en torno a 66 millones de euros. Eso va a originar una serie de inversiones que en León hacen mucha falta. La carretera de Valadeón a Caín, dotar de equipamiento a la Fonsella, hace falta un centro de visitantes en Posada, aparcamientos aquí y en Oseja... mucha infraestructura e inversión. Y además hay un reto a seis años vista, la supresión de la actividad cinegética. -¿Cuándo se hace efectiva? -En el 2008. Deberá de afrontarse ese reto de forma que ocasione las menos heridas posibles, con mucha sensibilidad porque de todos es conocido el arraigo de la caza en esta vertiente del parque. Y luego está la imbricación de la Red Natura 2000 en las competencias del parque. Teóricamente empieza a aplicarse dentro de poco y va a generar una serie de obligaciones para las comunidades autónomas y un ejercicio competencial que van a tener que imbricarse mucho con las de este parque. Todo el territorio de Picos en León es Red Natura. -¿En qué deberá traducirse eso? -Tendrán que arbitrarse los mecanismos entre la Administración del Estado y de las comunidades autónomas desde el punto de vista de gestión. Yo veo esas tres cuestiones de futuro en León: el desarrollo y la inversión necesaria y derivada del PRUG, la extinción de la actividad cinegética, cómo se va a aplicar la Red Natura 2000 en Posada y Oseja y cómo se va a coordinar eso con las competencias del parque. -¿Por qué hay más visitantes en Cantabria y Asturias si la joya está en León? -En Asturias porque el gran foco de entrada es Cangas de Onís y Covadonga, que ha sido germen del parque nacional, tanto del actual como del de Covadonga, y tiene una difusión ya: los lagos, la Vuelta Ciclista a España... Es una vertiente que está muy promocionada. En la vertiente cántabra pasa un poco lo mismo. Fuente Dé es un foco turístico increíble desde los 60, cuando se construyó el teleférico. En León debiera de promocionarse el parque y también hacer unas infraestructuras que como dije permitan una capacidad de acogida importante. Doy fe del trabajo de la Junta. Y no me cabe duda que va a redundar en un mayor conocimiento e interés de la ciudadanía que quiera visitar Picos de Europa y que previsiblemente va a generar un mayor flujo de visitantes que el actual, cuando las infraestructuras sean las que prevé el PRUG. -El parque se creó por sus especiales características naturales. ¿En qué se ha avanzado desde 1995? -Se crea por ser representativo de uno de los ecosistemas establecidos en la ley, en este caso la provincia eurocantábrica en la región eurosberaiana, por la singularidad de su flora y de su fauna y también por el aspecto cultural que tiene el terriotorio, muy importante en este parque porque son los orígenes no sólo del Estado español sino también por un aspecto religioso importante: Covadonga, la Virgen de Corona, la de las Nieves en Cantabria... Estos años se han hecho trabajos de preservación de todas las especies existentes, conciliando la de algunas «malditas» como el lobo con la supervivencia de los colectivos y de la economía inherente a ellos y que ven mermados sus ganados como consecuencia de sus ataques. Se están ejercitando todos los trabajos del PRUG, como inventario de flora característica endémica, estudios de capacidad de acogida, seguimiento del aspecto sanitario de la fauna... -¿Se ha erradicado el furtivismo? -Sí. Sólo me consta un episodio en la vertiente asturiana por denuncias de la guardería. No existe ese problema ahora mismo en el parque, el furtivismo no existe. -Quizá queda aún pendiente convertir Picos en un santuario mayor de dos especies tan cantábricas como el oso pardo y el urogallo. -La vertiente leonesa es precisamente la más rica en presencia del oso. En Valdeón y Sajambre tenemos constancia de presencia, y este año en la cántabra también tenemos localizada una hembra con dos crías. No existían en el 2000 y aparecieron este año. Aunque es verdad que en la asturiana no. De urogallo también la vertiente leonesa es la más rica en esa especie, seguida de la cantábra; por desgracia la asturiana va a la cola. León puede presumir de ser la ser más rica en esas dos especies. También se está haciendo un trabajo, a través de la Fundación Quebrantahuesos, de recolonización de esta ave. Y también en León se ha encontrado el vestigio de un nido en un cortado y parece que existe la certeza de ejemplares divagantes por el territorio leones.