La afiliación sindical de los agricultores leoneses alcanza el 80% de los activos

El fenómeno de sangría poblacional no ha encontrado final en los últimos veinte años. El respaldo social a las organizaciones agrarias leonesas, sin embargo, mantiene el tipo con un porcentaje de afiliación que ronda el 80% del censo de agricultores o ganaderos a título principal que le quedan al campo leonés (9.300). Los cuatro sindicatos agrarios radicados en la provincia suman 7.400 afiliados, según las cifras aportadas por las propias organizaciones. A partir de este punto, entran los matices. Asaja León detalla que entre las más de 2.300 explotaciones agrícolas o ganaderas que representa, alcanza a dar servicios a 3.800 activos afiliados, lo que supone un liderazgo incontestable dentro del panorama sindical agrario leonés. La organización de Jóvenes Agricultores, cuyos orígenes se remontan a diciembre del año 1985, goza de un respaldo mayoritario también en las dos últimas consultas electorales a las que se ha sometido el mundo agrícola de la provincia leonesa para definir la representación en la Cámara Agraria. En segunda línea de fidelidad sindical, que también encuentra una respuesta acorde en los comicios electorales de la Cámara (según los datos del año 2002) se encuentra el sindicato Ugal, integrado a nivel nacional en la Unión de Pequeños Agricultores. La última cifra de afiliación ofrecida por esta organización es de 2.200 representados; el porcentaje de votos en las elecciones a la Cámara hace cinco años rondó el 30%. La UCCL, Unión de Campesinos de Castilla y León, declara una afiliación con 950 asociados «que pagan la cuota religiosamente», matiza su presidente, Juan Antonio Rodríguez. Con medio millar de afiliados se mantiene Ucale, que representa las siglas históricas de Coag en León desde el pasado mes de octubre, cuando esta formación se asoció con la Coordinadora Agraria, la otra parte que resultó de la división de la Coag a nivel autonómico. Los representantes agrarios celebran el índice de respuesta entre el sector, peculiar, si se compara con otros ámbitos económicos y sociales, en los que el nivel de seguimiento de los sindicatos resulta mucho menos generoso con las siglas sindicales.