Diario de León

La parte social advierte de que los retrasos en la innovación hacen peligrar el futuro del grupo

El 13% de la facturación de Antibióticos este año procede de los nuevos productos

La empresa achaca los resultados al Plan Industrial y resta importancia al cese de la producción china

Los productos nuevos suponen todavía una parte mínima de la facturación del grupo en León

Los productos nuevos suponen todavía una parte mínima de la facturación del grupo en León

León

Creado:

Actualizado:

El grupo Antibióticos en León no tendrá este año beneficios, tal y como estaba previsto en el Plan Industrial firmado hace ahora dos años, pero registrará unas pérdidas muy inferiores al panorama que se dibujaba el pasado mes de marzo. La causa es el espectacular aumento de la facturación de la fábrica leonesa gracias a sus productos tradicionales (las penicilinas), cuya demanda ha cambiado radicalmente en los mercados internacionales. Fue precisamente la entrada en escena de los productos de este tipo fabricados en India y sobre todo en China, la que hizo caer en picado los resultados de la histórica industria química leonesa. Y ahora es, según algunas interpretaciones, el cierre de esas fábricas chinas el que ha permitido que las sustancias fabricadas en León vuelvan a ser demandadas, lo que ha disparado las ventas en los últimos meses. El grupo italiano P&R (antes Sir Fidia, la multinacional italiana a la que pertenece la fábrica leonesa) achaca los buenos resultados del grupo a la gesión del equipo comercial y al éxito del Plan Industrial firmado para el reflotamiento de la empresa. Sin embargo, informes realizados por la parte social advierten de que el cierre de las empresas chinas no es definitivo, y que si vuelven a abrir los antibióticos fabricados en León tendrán de nuevo dificultades en los mercados internacionales. El alivio en las pérdidas multimillonarias de la empresa sería, según estas interpretaciones, coyuntural, y no se debería en ningún caso a la puesta en el mercado de productos más competitivos. El caso es que, según el propio informe de la empresa presentado la semana pasada a la Comisión de Seguimiento del Plan Industrial (de la que forman parte además de la empresa y los sindicatos la Junta y el Ministerio de Industria), del total de facturación con que concluirá la empresa este ejercicio los nuevos productos suponen un 13%; mientras que casi 9 de cada 10 euros corresponden a los productos tradicionales. Aquellos que, según el Plan Industrial, llevaron a la empresa a una grave crisis económica por «la pérdida de competitividad, la difífil viabilidad y los resultados negativos motivados por la pérdida de los mercados internacionales, la caída en los precios por la entrada de los nuevos productos, el cambio dólar/euro y la insuficiente diversificación de la oferta de productos, además de una estructura de costes poco competitiva». Mientras la dirección del grupo insiste en aferrarse a los datos positivos, que es cierto que llegan después de muchos ejercicios de pérdidas multimillonarias, los sindicatos insisten en que el panorma actual dista mucho del dibujado en el Plan Industrial. Especialmente en lo que se refiere a Vitatene, empresa en la que en los últimos años se ha basado el proyecto de futuro de la fábrica leonesa y cuya inversión (casi 16 millones de euros) ha sido «aparcada» ahora por el grupo italiano. Buenos resultados Según un informe realizado por la parte sindical, los buenos resultados de Antibióticos se deben por un lado a la racionalización de la estructura de costes, gracias en gran parte a «las 73 prejubilaciones soportadas en su mayor parte por fondos públicos»; así como a una reducción de los gastos de mantenimiento «que están teniendo sus consecuencias en un incremento de la siniestralidad laboral». También achacan la buena marcha de las ventas de la fábrica a la «coyuntura de los mercados, en los que los fabricantes chinos se han visto obligados a cerrar momentáneamente por motivos de seguridad, aunque se dice que abrirán en los próximos meses». Por lo que se refiere a la necesaria diversificación de productos en la planta leonesa, la parte social advierte de que «todavía está dando los primeros pasos y no está exenta de riesgos». Los sindicatos recuerdan que las inversiones pactadas acumulan un retraso medio de 18 meses; y se muestran especialmente preocupados por la suspensión de la inversión en Vitatene, que a estas alturas debería haber duplicado hasta 80 toneladas/año una producción que hoy es de 10 toneladas/año.

tracking